La mortalidad en la carretera cae otro 13,4% en Cataluña en 2013

Un total de 168 personas fallecieron el año pasado en las carreteras catalanas. Es, a pesar de todo, un buen dato. Cayó la mortalidad el 13,4% (10 menos) y es la cifra más baja desde que la Generalitat asumió las competencias de tráfico, a pesar de que la movilidad ha aumentado desde entonces un 3%. El número de heridos graves también descendió, hasta las 906 personas.

“El dato más relevante es la tendencia continuada y positiva de reducción de la mortalidad y la siniestralidad grave que valida las políticas que se han hecho”, remarcó ayer el consejero de Interior, Ramon Espadaler, quien dijo que “se ha cumplido de sobra” el objetivo del plan 2011-2013 de reducir en un 15% la cifra de muertos y heridos graves de 2010, ya que se ha conseguido reducirla un 15,9% en ese periodo.

Aun así, reconoció que la evolución de la mortalidad en el segundo semestre, con más fallecidos que en el mismo periodo de 2012, con 21 muertos en agosto y 24 en diciembre, y el incremento de la movilidad han hecho que el departamento trabaje con la hipótesis de que se esté ante un cambio de tendencia. El otro gran pero de las estadísticas es la evolución de los accidentes entre motoristas. Una de cada cuatro víctimas de accidentes viarios conducía motocicleta, el 33% más que hace un año.

Los niños muertos en las carreteras han pasado de los dos contabilizados en 2012 a los seis del pasado año. Y, por primera vez, la presencia de psicofármacos (18) supera a la de drogas (13) en las autopsias de las víctimas mortales de los accidentes. “Son datos”, según el consejero, “que obligan a la acción” y por ello, su departamento será “beligerante” en el control del uso de los dispositivos de seguridad infantiles y pondrá más énfasis en la protección de los motoristas. Una de las buenas noticias es que se han reducido las muertes en horario nocturno.