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Instrumentos como esculturas

El Museo de la Música expone 130 objetos sonoros antiguos no europeos

Flauta que se puede ver en la exposición.
Flauta que se puede ver en la exposición.Fundación La Fontana

En la Casa de los hombres de la tribu Waxei de Papúa Nueva Guinea se escucha una melodía extraña. Una mujer se detiene para escucharla, pero no se atreve a entrar y desafiar la prohibición divina: Si su mirada cruzase la vista con la flauta, este instrumento ceremonial preñado de fuerza espiritual perdería su magia.

Hasta el 20 de Abril esta flauta de madera del siglo XIX forma parte de Escultures musicals, una selección de instrumentos extra europeos procedente de la colección privada de la Fundación La Fontana que se puede ver en el Museo de la Música del Auditorio de Barcelona: 130 piezas singulares de América, África, Oceanía y Asia. “Han sido escogidas por un comité científico entre las 2.000 piezas de la colección, por su calidad artística, su simbología y su dimensión social”, explica Elena Martínez-Jacquet, directora de la Fundación. En esos objetos sonoros la dimensión figurativa es tan importante “que a veces te olvidas que son instrumentos”, confiesa la directora: Tambores y trompetas con formas humanas asociadas a figuras de poder, instrumentos de cuerda y campanas de perfil animal, bloques de fricción, sansas y flautas con grabados y pinturas: “Sobre todo, la organología africana está repleta de animales totémicos y de personajes que remiten a la magia y a ideas abstractas”, señala Martínez-Jaquet.

Hechos de madera y fibras, cuero y huesos humanos, coral y metal, la mayoría pertenece a finales del siglo XIX y principio del siglo XX. Ninguno ha sido restaurado. “Los cogimos en un momento de su vida y así queremos que se queden”, explica Martínez-Jaquet.

El Auditorio completa la exposición con talleres y actividades y varias instalaciones audiovisuales, explica Jaume Ayats, director del Museo.En una de ellas se pueden ver mujeres asiáticas que cantan con tambores de agua, en las que hacen rebotar el elemento provocando hasta tres sonidos diferentes. En otro, se puede ver como en algunas tribus se utilizan escarabajos como fuente sonora.

“Estas culturas recuerdan que no necesitas nada para engendrar invenciones sonoras magníficas”, recalca Ayats. Y también que aún existen sociedades en que el arte, la música y la magia son disciplinas inseparables y donde el sonido juega un rol principal en la vida individual y colectiva. Frente a la flauta la superstición despierta: Las mujeres actuales podrán mirar al instrumento prohibido, pero nunca escuchar su melodía, un secreto destinado solo a su tribu.

El recorrido ofrece temáticas por cada continente, agrupando las obras por su tipología o por su uso profano o sagrado.

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