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Un jefe de la policía autonómica, cazado ebrio con un coche oficial

El inspector trató de resistirse con malos modos a la prueba de alcoholemia El incidente fue borrado del registro oficial del cuerpo autonómico

Xosé Hermida
Registro de la policía autonómica manipulado para ocultar el incidente
Registro de la policía autonómica manipulado para ocultar el incidente

Un miembro de la cúpula de la policía autonómica, inspector jefe del cuerpo, fue sorprendido por la Guardia Civil en la madrugada del pasado día 9 cuando conducía ebrio un coche oficial camuflado. Al mando policial se le detectaron 0,70 microgramos de alcohol en aire, casi tres veces el máximo permitido (0,25), según fuentes policiales. El inspector mantuvo un altercado con los agentes de la Guardia Civil ante la insistencia de estos en realizarle la prueba de alcoholemia e inmovilizar el vehículo. La Xunta ha abierto un expediente al inspector.

 Las fuentes consultadas explicaron que el jefe policial había usado el vehículo del cuerpo para un desplazamiento particular fuera de Santiago. Cuando regresaba, acompañado de otro agente autonómico, fue obligado a detenerse en un control de la Guardia Civil en el puente de A Rocha, a la entrada de la ciudad. Las mismas fuentes señalan que el inspector trató de resistirse con malos modos a la prueba de alcoholemia. Pese a todo, los agentes de la Guardia Civil se la practicaron y, tras comprobar el positivo, se pusieron en contacto con la comisaría de la policía nacional para confirmar la identidad de los ocupantes del vehículo. Posteriormente, llamaron también a la policía autonómica a fin de corroborar que se trataba de un automóvil oficial y solicitar que acudiese alguien a retirarlo.

El incidente acabó provocando una insólita concentración de agentes en el puente de A Rocha, ya que hasta allí se desplazaron dotaciones de las policías nacional y autonómica. Una patrulla de esta última retiró el vehículo una hora después. La llamada de la Guardia Civil a la central de la policía autonómica para comunicar los hechos se incluyó, como es reglamentario, en el libro de registro de la comisaría, que posteriormente fue manipulado con líquido corrector para borrar los detalles. Un portavoz de la Consellería de Presidencia señaló que el expediente al inspector “está en curso y puede conllevar sanciones”. En cuanto a la alteración del libro de registro, “se ha efectuado una instrucción recordando que cualquier modificación debe realizarse por los cauces reglamentarios, dejando constancia de que se ha producido dicho cambio y justificándolo pertinentemente”

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Sobre la firma

Xosé Hermida
Es corresponsal parlamentario de EL PAÍS. Anteriormente ejerció como redactor jefe de España y delegado en Brasil y Galicia. Ha pasado también por las secciones de Deportes, Reportajes y El País Semanal. Sus primeros trabajos fueron en el diario El Correo Gallego y en la emisora Radio Galega.

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