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El do sostenido de un festival

La gran cita de la música española en Cádiz se mantiene, a pesar de la retirada de sus patrocinadores salvo la Junta, con la presencia de orquestas, conciertos y talleres

La Orquesta Filarmónica de Málaga, durante una actuación en el festival gaditano.
La Orquesta Filarmónica de Málaga, durante una actuación en el festival gaditano.

Aún hay gaditanos que recuerdan las campanas de la ciudad resonando todas a la vez, o un piano con ruedas recorriendo las calles del casco histórico con una niña disfrazada de hada sentada sobre su tapa. Así se estrenaba cada año el Festival de Música Española de Cádiz, a lo grande, con consejeros y directores generales paseando rodeados de música por plazas y lugares de camino al Gran Teatro Falla, al concierto inaugural. Este año se cumple la 11ª edición. Ya no hay esos espectaculares comienzos, y hace años que un consejero no acude al estreno. Pero ahí sigue, 11 años después. Como cada noviembre, viene con el frío y con el mismo espíritu de siempre.

El Festival de Música Española de Cádiz, organizado por la Consejería de Educación, Cultura y Deporte, arrancará el próximo jueves con la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla (ROSS) bajo la batuta del director Lorenzo Ramos. El repertorio se compone de obras románticas de inspiración española de Bizet, Glinka, Massenet y Rimsky Korsakov. Y es que precisamente ése es el origen de este acontecimiento musical: llevar al público música española y de inspiración española. Es un festival sinfónico, pero también un laboratorio de creación y un centro de difusión, donde se estrenan las últimas obras de compositores actuales en los mismos espacios donde se interpreta música de otras épocas.

Atractivo para otras disciplinas artísticas

El Festival de Música Española de Cádiz es un acontecimiento musical que con los años ha ido implicando a otras artes. Ya es habitual ver a jóvenes estudiantes y futuros artistas plásticos llenando el Gran Teatro Falla de carpetas y plasmando los sentimientos que les transmite la música en un papel, con óleos o lápices, dentro del taller Dibujando la música. Pero este año otra arte se presenta por primera vez en el festival: la literatura. De la mano del Centro Andaluz de las Letras se celebra el día 26 la mesa redonda Poesía y música en la Andalucía de hoy, en la que está previsto que participen Javier Ruibal, Tito Muñoz, Chipi de La Canalla y Clara Montes.

La mezcla es precisamente una de las señas de identidad de este festival, que sale del Gran Teatro Falla para llenar otros espacios como iglesias, la Universidad, la Diputación o el conservatorio. En total, más de 30 conciertos y actividades paralelas en 10 días. Además de las grandes orquestas andaluzas —ROSS, Filarmónica de Málaga, de Córdoba o Ciudad de Granada, que hace dos años actuó con Javier Perianes—, participan corales, solistas de la Orquesta Barroca de Sevilla o la pianista Paula Coronas.

Pero una vez que los conciertos terminan en las grandes salas, empiezan las otras músicas, las que atraen a los noctámbulos a los bares de la ciudad. Es el ciclo Músicas de Noche, pensado para incentivar a los bares que durante el resto del año organizan actividades culturales y dar una oportunidad también a los artistas de la zona, músicos de jazz, flamenco o cantautores que actúan en el famoso Pay-Pay, el Cambalache, el Café de Levante o la sala Arsa.

La fusión es también la insignia de uno de los conciertos más esperados: Las idas de las vueltas,el jueves 28, con el flamenco de Arcángel y el barroco de la Accademia del Piacere. “Los grandes nombres sirven en este festival para difundir la cultura andaluza”, explica Reynaldo Fernández, director de esta cita. “Y la cultura andaluza significa fusiones con otras culturas. La investigación actual pone el foco en el barroco, y en algunas danzas que se popularizaron en el siglo XVIII, como las jácaras, los tangos o el zapateado. Los investigadores ven ahí el posible origen del flamenco”.

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El festival rinde este año homenaje a Antón García Abril con motivo de su 80 cumpleaños. La solista Paula Coronas se sentará al piano para recordar a un compositor que siempre ha estado muy ligado a este acontecimiento musical desde su nacimiento. Y la Orquesta de Córdoba, dirigida por José Luis Temes y con Iñaki Alberdi en el acordeón, también recordará al músico turolense con Tres sonatas del padre Soler, recreación orquestal del gran repertorio de teclado del siglo XIII realizado por el autor.

Un piano dibujado por Javier Navarro.
Un piano dibujado por Javier Navarro.

Estos 10 días musicales continuarán con la Orquesta de Saxofones de Cádiz, el Día de la Música Coral o el Trío Alborada. Y finalizarán con la cantaora y pianista María Toledo y la Orquesta de Córdoba, dirigida por Jesús Bola, con el concierto Con otra mirada.

Esta 11ª edición se ha presentado con una dificultad que no se daba en sus años de historia: por primera vez, la Junta de Andalucía asume en solitario la organización de la cita. Cuenta con colaboradores necesarios, como la Sociedad General de Autores y Editores [UNOS 10](SGAE[/UNOS 10]), el Obispado, la Diputación y el Ayuntamiento de Cádiz o la Asociación de Amigos de la Música de la Bahía de Cádiz. Pero progresivamente se le han ido retirando ayudas económicas: hace tres años, la Diputación dejó de aportar el patrocinio de Cádiz Suena, un concierto con la Orquesta Manuel de Falla y otros grupos de la provincia. Hace dos, el Injuve se retiró de la organización. El año pasado, el Ayuntamiento dejó de ceder gratuitamente sus espacios, con lo que el festival tiene que asumir desde entonces los gastos que ocasiona su utilización. Este año se ha ido el último apoyo que le quedaba a la Junta: el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y la Música (INAEM), dependiente del Gobierno central. Aún así, el festival se mantiene en do sostenido. Como cada noviembre, cuando viene el frío.

En femenino

Hace ocho años, en 2005, un grupo de mujeres se reunió por primera vez en Cádiz con una ilusión común: dar visibilidad a la música hecha por ellas mismas. Desde entonces, el Taller de Mujeres Compositoras que impulsa la Fundación SGAE se ha convertido en un punto de encuentro y creación, un espacio de reflexión para las creadoras musicales contemporáneas. El festival es el sitio elegido para estas reuniones y para que el público pueda escuchar los estrenos absolutos de estas compositoras, entre las que se encuentra la veterana María Luisa Ozaíta. Y es que de esta iniciativa surgen diferentes composiciones e incluso publicaciones, ediciones de música impresa, encargos de obras y grabaciones sonoras. Cada año el festival estrena las obras compuestas al abrigo del taller de la edición anterior. En esta ocasión será el día 23, cuando la concertista María Teresa Chenlo, de origen uruguayo pero afincada en España, debutará con la interpretación de las obras de las autoras Carme Fernández, Rosa María Rodríguez, Dolores Serrano, Marisa Manchado, Consuelo Díez, Diana Pérez, Teresa Catalán, Anna Bofill y la propia Ozaíta. "Es la primera vez que estas compositoras eligen el clave como instrumento para su creación, lo que supone mi estreno en el taller y el festival", explica la intérprete. Chenlo recuerda además que el clave es un instrumento que comenzó a tener auge en la música contemporánea con el gaditano Manuel de Falla, por quien nació esta cita y a quien cada año se le rinde homenaje. El programa de este año incluye también la presentación del libro 12 compositoras españolas de hoy, de Rosa María Rodríguez.

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