Velas y flores para las cinco víctimas mortales del caso Madrid Arena

Unas 300 personas se concentraron anoche frente al pabellón municipal Madrid Arena, justo cuando se cumplía un año de la celebración de la fiesta Thriller Party con motivo de Halloween en la que murieron cinco jóvenes. Familiares y amigos pusieron velas, flores y pancartas en las que pedían justicia y cárcel para todos los responsables de la tragedia. Se vivieron momentos de gran emoción cuando los allegados leyeron cartas y poemas en recuerdo de las fallecidas.

La iniciativa partió de Isabel Lafuente, madre de Cristina Arce, que planteó que se celebrara una vigilia en recuerdo de las fallecidas bajo un llamativo lema: "12 meses, 5 muertes, 0 responsables. ¡Justicia Madrid Arena ya!". La única petición es que acudieran con una flor y con una vela.

Los escasos diez grados que se vivieron anoche no motivó que muchos amigos y familiares acudieran al lugar de la tragedia, que estaba vallado para impedir que los allegados se acercaran al pabellón municipal. Cinco potentes focos iluminaban la zona. Poco fueron llegando los compañeros de las fallecidas y pusieron velas junto a las vallas blancas. Al principio fueron muy pocas, pero, conforme avanzaba la gélida noche en la Casa de Campo, creció el número hasta hacer un improvisado altar en el que también se veían fotos de las fallecidas. Algunos llevaban llamativas camisetas amarillas con el lema de la concentración. A lo lejos tres furgones de la Unidad de Intervención Policial (UIP, más conocidos por antidisturbios) vigilaban la zona.

La indignación y la rabia era la nota dominante de los congregados. Muchos no entendían cómo era posible que hubieran pasado 12 meses y que ninguno de los responsables de la fiesta de Halloween estuviera en prisión ni hubiera concluido la instrucción del caso. "Siento mucha impotencia porque no es lógico que murieran cinco chicas cuando lo único que querían era divertirse. Es superincreíble que no hayan hecho nada cuando está todo clarísimo y que no hayan tomado medidas para que no vuelva a ocurrir", se quejaba Aarón, amigo de Rocío Oña.

Los familiares también colocaron pancartas con el lema de la vigilia y con otros similares. En algunos se podía leer "Después de un año todo sigue igual. Justicia ya", "Ni un día de cárcel por 365 sin vosotras" y "Un año sin tí y 19 contigo". Algunos compañeros se fundieron en abrazos tras recordar a las víctimas. "Ahora es cuando nos estamos dando cuenta de que no están entre nosotras", añadío Mónica, otra amiga de Rocío.

Una de las protagonista de la noche fue la convocante, que criticó que no se controlara "absolutamente nada" durante la fiesta en la que perdió la vida su hija. "Todo lo que se hizo o no se hizo mal o se hizo mal. No se controló absolutamente nada". "Ha sido un año muy raro, muy difícil. Parece incluso que no ha pasado ni ese año. Ahora solo queda luchar para que no vuelva a suceder algo así", explicó Lafuente, que reconoció que el Ayuntamiento de Madrid sí ha aumentado las inspecciones en los locales públicos.

Durante la vigilia hubo una lectura de cartas y poemas en recuerdo de las cinco jóvenes fallecidas. Muchas de ellas estaban cargadas de mucha emoción y a más de uno de los que las leían les costó terminarlas por la emoción del momento. Laura Visman tenía el encargo de hacer una carta de despedida a su amiga Rocío, pero no pudo. De hecho se tuvo que parar en lectura, porque las lágrimas la impedían seguir. Recibió un cerrado aplauso de los asistentes. "Ni puedo ni quiero despedirme de tí. Aun nos queda el vernos. Te quiero y te querré siempre", concluyó su intervención.

El acto terminó alrededor de las dos de la madrugada. De fondo, a unos 200 metros, el fatídico pabellón permanecía encendido y cerrado, en medio del silencio y del frío. Una imagen muy distinta a la vivida justo un año antes con miles de personas viendo a famosos djs o haciendo botellón en los exteriores del recinto.