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Nicki Bluhm, la voz femenina del nuevo country

Tindersticks ponen elegancia frente a la contundencia de Orphaned Land y Atari Teenage Riot

Nicki Bluhm.
Nicki Bluhm.

La música norteamericana de raíz tiene en Nicki Bluhm una nueva abanderada. En su propuesta se une el rock clásico americano de los setenta de regusto hippy, con desgarros a lo Janis Joplin, con el country de grandes damas como Linda Ronstadt o Joni Mitchell. Con su banda The Gramblers, Bluhm encontró en las redes sociales el vehículo para darse a conocer. Un video suyo colgado en Youtube les lanzó a la fama hace apenas dos años. Country folk y soul, y ese espíritu californiano plasmado ya en dos discos en solitario, Drifwood (2011) y Duets (2010) la han llevado a hacer Nicki Bluhm and The Gramblers, su tercer disco con el que afronta su primera gira europea. Para su actuación del domingo en la sala madrileña La Boite, Nick Bluhm viene en formato de trío acústico pues estará acompañada por su marido, Tim Bluhm (The Mother Hips) y el guitarrista Scott Law.

Pero antes, la contundencia sonora de este fin de semana llega de dos bandas que, por sus orígenes, podrían parecer antagónicas. La alemana Atari Teenage Riot, y la israelí Orphaned Land. Curioso, alemanes y judíos comparten en muchos aspectos actitud y discurso.

Atari Teenage Riot surge como respuesta a las bandas neonazis que empezaron a crear problemas en la Alemania de los noventa, al poco de la reunificación del país tras la caída del muro de Berlín. De esa ciudad son, y en sus letras hay cierto espíritu anarcoide contra todo totalitarismo. Su politizado discurso lo sustentan sobre un hardcore estruendoso plagado de recursos muy tecno. Hoy sacudirán la sala Arena.

Orphaned Land harán lo mismo mañana en la sala Copérnico, aunque lo de estos israelíes se basa más en el heavy metal, con un carácter progresivo. También se formaron en los noventa aunque su reconocimiento fuera de sus fronteras es mucho más reciente. En un país tenso como del que provienen, Orphaned land hablan de romper barreras religiosas, de juzgar a la gente solo por lo que son como personas, “por su corazón y sinceridad interior”, como dicen en una canción, no por su condición de raza, religión e ideología. En el año 1994 debutaron con un disco llamado Sáhara, que empezaba a esbozar ese estilo tan suyo de mezclar metal progresivo con otras corrientes musicales antiguas de Oriente, con algún ramalazo árabe y sefardí, a pesar de las diferencias de origen entre ambos. Su reciente disco es All is one, y en su portada, como toda una declaración de principios, aparecen juntas la estrella de David judía, la cruz cristiana y la media luna musulmana. Su presentación justifica la gira que les lleva ahora por Europa.

Por el contrario, los ingleses Tindersticks ponen esta noche el tono melancólico, muy adecuando para salir de la pesadilla de Halloween. Formados en la ciudad de Nottingham, Tindersticks tuvieron mucha proyección en los noventa, pero llevan veinte años sin parar y ahora están de gira para celebrar un aniversario redondo. En todo este tiempo no han dejado de crear buenos y elegantes discos, aunque nunca a la altura que se esperaba de ellos cuando comenzaron, acaso porque las primeras críticas en su país fueron pelín exageradas anunciándoles casi como unos nuevos Beatles. El último se llama se llama Across Six Leap Years y mantienen el perfil suave, elegante e intenso del que han hecho imagen de marca.

Hoy también regresa a los escenarios de Madrid el cantautor Lucas Álvarez de Toledo el frente de ese proyecto personal suyo de psicofolk llamado Pez Mago. Lucas es el guitarrista de DePedro, el grupo madrileño de Jairo Zavala que acaba de finalizar una gira europea de 18 conciertos por 18 ciudades europeas de Bélgica, Alemania, Austria, Suiza e Italia en veinte días.

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Otro cantautor, Paskual Cantero, el joven murciano más conocido como Muerdo, estrena mañana las canciones de su reciente disco, Tocando tierra, segundo de su carrera, que ha sido producido por Amparo Sánchez (Amparanoia) y que cuenta con colaboraciones de lujo como las de Pedro Guerra y El Lichis.

VIERNES: Atari Teenage Riot, Arena (Princesa, 1), 20:00. 22 euros. Tindersticks, Joy Madrid (Arenal, 11), 20:00. 20 euros. Pez Mago, Libertad 8 (Libertad, 8), 21:30. 6 euros SÁBADO: Muerdo, Galileo Galilei (Galileo, 100), 21:00. 10 euros. Orphaned Land, Copérnico (Fernández de los Ríos, 67), 19:00. 24 euros. DOMINGO: Nicki Bluhm, La Boite (Tetuán, 27) 20:30. 15 euros.

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