El mundo de Emmet Gowin en 200 pasos

Emmet Gowin (Danville, Virginia, 1941) es conocido como "el fotógrafo de la intimidad".Admirador de los grandes del género, como Robert Frank, Cartier-Bresson o Walker Evans, se dejó guiar en sus primeros pasos por su mentor Harry Callahan hasta conseguir un lenguaje personal al captar la parte más sensible de la realidad que le rodea. Una exposición muestra en la sala Rekalde a través de dos centenares de fotografías que recorren su carrera el universo de Gowin.

El comisario de la exposición, Carlos Gollonet, destaca la originalidad de las imágenes de Gowin, "la conexión emocional entre todos los temas que captura con la cámara". Gollonet apunta que sus fotografías traducen en imagen sus ideas y pensamientos y son casi como "versos" de un "largo poema autobiográfico".

El fotógrafo estadounidense retrató en multitud de ocasiones a su esposa, Edith Morris. Fue su musa porque, según sus explicaciones, "en ella descubrió los rasgos más esenciales de la naturalidad personal". Cuando retrata a su familia, explica Gollonet, "lo que nos sorprende es que nos encontramos ante momentos cotidianos, comunes en cualquier lugar del mundo desde que existe la humanidad". Son, añade, "fotos directas, desprovistas de adornos".

Gowin también ha sentido la atracción por la naturaleza, que le ha llevado a fotografiar paisajes y la influencia que la actividad humana ha tenido sobre ellos, o las erupciones volcánicas. Su fascinación por los insectos queda patente en la serie dedicada a las mariposas. La exposición también incluye las últimas series del fotógrafo sobre paisajes de Granada.