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De Gispert, PP y Ciutadans rebajan la tensión tras el 12-0

La presidenta del Parlament pide evitar imágenes "lamentables" como la del último Pleno

Àngels Piñol
Un momento de la Junta de Portavoces extraordinaria celebrada este martes en el Parlament.
Un momento de la Junta de Portavoces extraordinaria celebrada este martes en el Parlament.FOTO PARLAMENT

El último Pleno del Parlament acabó con una tensa escena en la que los diputados del PP y de Ciutadans abandonaron de forma airada el hemiciclo al acusar a la presidenta Nuria de Gispert de falta de neutralidad durante el debate de una moción de condena al franquismo. “Es una vergüenza lo que están haciendo. ¡Muy bien, muy bien! ¡Perfecto! ¡Váyanse!”, espetó de De Gispert. Los dos grupos anunciaron después que pedirían la dimisión de la democristiana si no se disculpaba. Y ayer las dos partes dieron con una salida pactada: la presidenta confirmó que los grupos se habían comprometido a “no tensar la cuerda” para no repetir escenas como la del jueves y ella garantizó que estará más atenta tras las acusaciones de imparcialidad de varios diputados.

La presidenta negó ser imparcial pero dijo que estará más atenta para evitar esa percepción

El PP ha aparcado de momento la petición de dimisión y avanzó que estará “vigilante” a la espera de cómo evolucionen los acontecimientos. En una intensa reunión de la junta extraordinaria de portavoces, De Gispert definió los hechos de “muy graves” y lamentó la “imagen dada por la institución. En su intervención inicial, la democristiana achacó el ambiente de crispación a unos “grupos más que a otros” y abogó para que la cámara refleje el espíritu pacífico y festivo que se vivió en la cadena humana de la Diada y en la concentración del 12 de Octubre.

Enric Millo, portavoz del PP, y Jordi Cañas, de Ciutadans, recriminaron a la presidenta que se sienten discriminados con su trato. De Gispert negó la mayor pero se resignó a que algunos tengan esa percepción: “Bueno, señor Cañas...Intentaré ser más neutral...Todo el mundo se equivoca y yo la primera”, deslizó la presidenta al final de la sesión. De entrada, De Gispert reducirá el número de intervenciones por alusiones donde se concentran los momentos de mayor tensión : en nueve meses se han dado 230 y en la última legislatura, 428.

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