La tranquilidad del hogar

1. Teatro Alfil. Es la sala donde está triunfando Venidos a menos, la obra que hemos escrito David Ordinas y yo. Hace mucha ilusión que funcione el espectáculo, porque es donde más hemos podido ser nosotros mismos, aunque no sea autobiográfica: todo es más o menos mentira. Es muy bestia e incorrecta. La organización del espacio ayuda porque hay partes tipo cabaré y podemos caminar entre las mesas. Así tocamos más al público y les escupimos de cerca (calle del Pez, 10).

2. La Latina. Es el barrio donde más tiempo he pasado. Viví allí unos cuatro años. Le tengo mucho cariño y siempre que voy lo disfruto. Aunque había muchas veces que estaba un poco harto de estar siempre metido en el ajetreo continuo, con gente todo el rato en los bares y saliendo a tomar algo por la misma zona. Muchas noches volvía de actuar y tenía que esquivar las terrazas. Pensaba: “¡Quiero salir!”.

3. Parque Juan Carlos I. Me pilla muy cerca de mi actual casa y ha sido un descubrimiento. Lo utilizo siempre que puedo para correr o montar en bici. Ha supuesto un cambio grande tras vivir en el centro.

4. Templo de Debod. Es un tópico, pero es un rincón de la ciudad que parece que no pertenece a Madrid. Las vistas a la Casa de Campo son impresionantes. Y los atardeceres. Hay mucha gente que viene de fuera que no lo conoce. Ven lo esencial del centro, los museos, la Puerta del Sol y la plaza Mayor, pero no llegan hasta allí. Yo suelo llevar allí a todas las visitas (paseo del Pintor Rosales, 2).

5. Ópera. Todo en el barrio es bonito. El Teatro Real, el Palacio de Oriente y el parque, las callejuelas… Me gusta mucho pasear por esa zona, donde, aparte, todo el tema de la restauración está muy bien.

6. Restaurante Ouh Babbo!. Es el restaurante italiano que mejores pizzas hace de Madrid. Todo está tremendo. Lo llevan el actor Bruno Squarcia, que es colega, y su mujer. Los jueves hace una serenata de canciones italianas y está muy chulo. Puedes comer, beber y cantar con él. Pilla en pleno centro, al lado de la Gran Vía (Caños del Peral, 2).

7. Bar La Perejila. Es el típico bar de tapas. Toda la comida es cojonuda. Me gusta también la decoración andaluza, muy barroca, y la forma en que llevan el local. Siempre que salgo por la zona me paso por allí. Es imprescindible (Cava Baja, 25).

8. Mi casa. Soy un tío muy casero y hogareño. Ahora estoy por la zona de Canillejas, que es muy tranquila, y he notado una barbaridad la diferencia a los años de estar por el centro. Aunque suene a coña, me gusta mucho la tranquilidad y pasar tiempo en casa.

9. Teatro Lope de Vega. Le tengo mucho cariño porque es donde me estrené interpretando el musical Grease, hace casi 15 años. Fue lo primero a nivel profesional y en un teatro de la Gran Vía. Lo recuerdo cada día porque fue el primer escalón para dar el salto a la fama internacional (Gran Vía, 57).

10. El Retiro. Es lo que dice todo el mundo, ya lo sé. Pero para mí es curioso porque me gusta desde que llegué a la ciudad y no voy todo lo que quisiera. Cuando vienen mi familia o mis amigos los llevo a pasear por el parque y al final soy yo el que más lo disfruto.