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Entrevista / Antonio Maíllo Coordinador de IU

“El tiempo nuevo llegó cuando IU entró en el Gobierno andaluz”

El coordinador asegura que si IU tuviera más representación el Gobierno será "más audaz" Asegura que "no va a renunciar" a aplicar una tasa a los grandes superficies comerciales "Hay que abrir desde Andalucía una fisura en favor del debate de la fiscalidad"

Lourdes Lucio
Antonio Maíllo coordinador de izquierda unida de Andalucía.
Antonio Maíllo coordinador de izquierda unida de Andalucía.JULIÁN ROJAS

Apenas lleva tres meses al frente de la coordinación de Izquierda Unida de Andalucía y en ese periodo dimite el presidente José Antonio Griñán, eligen a la presidenta Susana Díaz y toma posesión un nuevo Gobierno andaluz. Antonio Maíllo Cañadas (Lucena, 1966) discrepa de la jefa del Ejecutivo sobre el “nuevo tiempo” que asegura representar. “El tiempo político nuevo llegó cuando IU entró en el Gobierno”, sostiene.

Pregunta. Usted está en política desde los 18 años, pero no es un político profesional hasta que lo eligen coordinador en julio pasado. ¿Cómo ve a su gremio?

Respuesta. Tengo una cierta dificultad para adaptarme al gremio de la política profesional. Encuentro un porcentaje de egolatría mayor de la media social. La gestión de los egos es lo más difícil en la interlocución política. Por lo demás, con las miserias y grandezas que tenemos todos los grupos sociales.

P. Griñán dimite por etapas: anuncia que no va a repetir como candidato y al mes, renuncia. ¿Le sorprendió?

R. No me gustó. Anuncia que no se va a presentar pero que va a agotar la legislatura, luego no lo hace y en mitad de ese tiempo abre un debate de primarias, que no lo son, en su partido… En fin, con todos esos mensajes no se ayuda a elevar la credibilidad de los políticos en el ámbito social.

P. La presidenta de la Junta anuncia un nuevo tiempo después de 31 años de gobiernos del PSOE. ¿Usted le compra el eslogan?

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R. No le compro el eslogan a nadie. El tiempo político nuevo, sin lugar a dudas, llegó cuando IU entró en el Gobierno. Por un hecho elemental: es la primera vez que hay un Gobierno de coalición. La experiencia del PA no se puede considerar así porque cada uno iba por su cuenta. Aquí hay un acuerdo político en el que por primera vez participa una fuerza que no lo había hecho antes. Es más, los elementos de diferencias, que las hay en Andalucía, las está marcando IU claramente.

P. ¿Y también es la primera vez que hay un Gobierno de izquierdas?

R. Hay un Gobierno con dos fuerzas de izquierdas, pero las políticas que se hacen, si nosotros tuviéramos más representación, serían más audaces y más atrevidas.

P. ¿En qué?

R. En el debate sobre los ingresos. Esa es una cuestión clave que nosotros planteamos. Y el ser más rápidos en la ejecución de políticas de transparencia, que son las que pueden evitar cualquier tipo de asunto vinculado a la corrupción o práctica de mal gobierno.

P. ¿IU va a plantear nuevos impuestos?

Rubalcaba, una dificultad

Antonio Maíllo cree que la experiencia del pacto de coalición de PSOE e IU en Andalucía no es exportable al resto de España, al menos con el actual líder socialista. “Con Alfredo Pérez Rubalcaba es muy complicada una alianza PSOE e IU para toda España. Rubalcaba representa el bipartidismo asentado durante todos estos años. Cuando yo estaba en COU, él ya era secretario de Estado de Educación, representa un modelo de Estado que se derrumba y simboliza una dificultad añadida a nivel federal”.

R. Para IU es una perversión que en este momento de crisis solo se hable de la obsesión del control del gasto y del recorte. Es un fraude político no mejorar una política de ingresos a través de una nueva fiscalidad. ¿Qué quiere decir esto? Que al Consejo de Política Fiscal y Financiera no se puede ir solamente a recibir del maestrito Montoro las lecciones sobre la contención del gasto o si hemos sido buenos o malos alumnos. Hay que abrir desde Andalucía una fisura en favor del debate de la fiscalidad. Y que pague el que más tiene. Los asalariados no pueden seguir teniendo más carga. Es verdad que Andalucía tiene poco margen, pero hay que aprovecharlo: establecer tasas a quienes pueden aportar a los ingresos de la comunidad y que esas aportaciones lo sean con una finalidad concreta. De ahí que defendamos la tasa a las grandes superficies para transferir el dinero recaudado al pequeño comercio.

P. El PSOE dice que no quiere esa tasa ¿van a pelear hasta el último momento para que se incluya?

R. Sí. Esa en concreto. Estamos en discusión. En esta primera fase de negociación vamos a emplear la pedagogía y la convicción. No vamos a renunciar a esta propuesta porque creemos que tenemos razón.

P. ¿Hay que esperar a una ley de transparencia para ser transparente?

R. No. Hay que hacer prácticas de transparencia. Y ser muy respetuoso con los procedimientos. Lo que pasa es que cuando lo conviertes en norma, la blindas, la conviertes en algo estructural. Ese es el valor de la ley, pero mientras tanto las prácticas de buen gobierno deben hacerse desde el primer día.

P. ¿Está de acuerdo en que hay que abandonar las subvenciones por los incentivos?

R. Las subvenciones han generado muchas perversiones respecto al uso. En cuanto a las relaciones entre Administraciones somos partidarios de las transferencias y con las entidades privadas somos más partidarios de otros mecanismos como los incentivos que deberían vincularse a la naturaleza del objeto financiable. No es lo mismo financiar una actividad para iniciarla que actividades relacionadas con el tercer sector o con ONG, donde la naturaleza de la subvención sigue cobrando relevancia.

P. ¿La CEA, UGT y CC OO reciben demasiadas subvenciones de la Junta?

R. No tengo capacidad para responder. Supongo que si están justificadas son suficientes o no, lo que hay que pedir es que sean transparentes, útiles y evaluables y se devuelvan si no se ejecutan para el fin previsto. Lo que sí me interesa es que en la interlocución de los agentes económicos con el Gobierno, la economía social tenga representación. Ahora no está y creemos que es prioritario.

P. Hay empresas públicas que no hacen nada y tienen muchos trabajadores. ¿Cuál es la posición de IU?

R. Hay que buscar fórmulas para llenar de trabajo esas empresas. Queremos que sean útiles. Eso de que no hacen nada no es exactamente así. La carga de trabajo ha bajado y hay que hacer cambios normativos que permitan hacer trabajos que ahora no se permite para otras Administraciones. ¿Por qué no se puede utilizar a los trabajadores de EPSA como aportación en especie en acuerdos de colaboración con los Ayuntamientos? Andalucía no se puede permitir el lujo de decisiones frívolas que supongan más despidos. Hay que estudiar una a una las empresas públicas para adecuar las propuestas.

P. IU lleva en su programa la creación de un banco de tierras y la presidenta habla de un observatorio…

R. No es lo mismo. El observatorio se queda en la diagnosis y nosotros planteamos un banco de tierras que es poner a disposición de la sociedad, a través de los municipios, las propiedades de uso agrícola que son propiedad de la Junta.

P. El ex consejero de Agricultura Luis Planas cifró solo en 500 las hectáreas disponibles, como dos veces la isla de la Cartuja.

R. No, son más. Pero aunque lo fueran, más motivos tendríamos para iniciarlo ya. El campo andaluz no puede esperar y el desempleo en las zonas rurales, menos. Hay propuestas ya desarrolladas en algunos municipios, como el de Castellar de la Frontera, que no creo que haya que esperar a más diagnósticos para poner en marcha.

P. Si fuera consejero de Hacienda, ¿en qué gastaría el dinero antes: en el banco de tierras o en becas a universitarios?

R. Esa es una pregunta trampa. Tendría que plantearse todo el marco de servicios de la Junta y tenemos una prioridad política que se llama educación pública. Me plantea un dilema de tragedia griega. Y a ninguna de las dos vamos a renunciar. Lo que tenemos claro es que vamos a destinar las partidas a la defensa de los servicios básicos y el banco de tierras debe establecer una colaboración con los Ayuntamientos y no hace falta una gran inversión.

P. En 2014 empieza el ciclo electoral y PSOE e IU compiten por el mismo espacio.

R. Competimos por unas políticas que salgan adelante. Y cuanta más fuerza tengamos más capacidad tendremos de ejercerlas. El entrar en una consideración de que además de socios somos competidores electorales creo que nos achica nuestra visión política. En este momento de crisis se está produciendo un fenómeno de cambio y de desafección que también afecta a gente que votó al PP y que estoy convencido no solo de que no volverán a votar al PP, sino que muchos votarán a IU.

P. ¿Del PP a IU?

R. Antiguos votantes del PP desengañados por esta estafa. No crea que todos los votantes del PP son de derecha acérrima. Nosotros queremos disputar la hegemonía y para eso hay que convencer a mucha gente.

P. ¿La CUT es un espantapájaros del potencial voto urbano de Izquierda Unida?

R. La CUT representa lo que representa, en un ámbito muy rural, circunscrita a la sierra sur sevillana. Es respetable y aporta una visión de las cosas que ahora está en minoría en IU, después de la asamblea andaluza. En un proyecto como el nuestro hace falta mucha más gente y no puede ser incompatible con la necesidad de incorporar a las capas urbanas.

P. ¿Usted también echa de menos una oposición estable?

R. No me he preocupado tanto de eso, como del desarbolamiento del PP en cuanto a sus mensajes con tinte de extrema derecha. El PP andaluz no coge el punto, no sintoniza. Ellos lo tendrán que resolver pero lo que me preocupa es que las políticas de derechas del Gobierno central condicionan las de Andalucía.

P. ¿Le preocupa que los sindicatos, especialmente UGT, estén cuestionados por un posible uso fraudulento de fondos públicos?

R. Más que enfocarlo en qué entidad puede estar más o menos afectada, lo que tenemos que centrarnos es en que se sepa todo del deleznable caso de los ERE. Esa es la mayor. Hay que investigar hasta el final. Tiene que haber celeridad, los andaluces no podemos esperar 10 años a saber la verdad sobre los ERE.

P. Pero el caso de los ERE sigue muy presente en este año y medio largo de Gobierno.

R. ¿A nosotros cómo nos va a afectar los ERE si eso pertenece a otros gobiernos? Nos podrán pedir responsabilidad a partir de la constitución del nuevo Gobierno en mayo de 2012. Además, garantizamos que no se produzcan esas prácticas. Lo que sí me preocuparía es que nunca se supiera la verdad, porque hubiera algún proceso por defecto o cualquiera otra incidencia.

P. ¿Qué opina del último auto de la juez Alaya?

R. No valoro los autos de nadie. Lo que pedimos es claridad y ese auto no tiene claridad. Si tiene que imputar, que impute.

P. ¿Qué opina de la posición independentista de Cataluña?

R. Que hay un problema político muy serio del encaje de Cataluña en España. IU tiene un proyecto federal y creemos en un mismo proyecto de Estado. No estamos de acuerdo con la independencia, pero sí que se consulte a la gente.

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