_
_
_
_
_

Rigau declina eliminar los conciertos con las escuelas de élite

La Generalitat destina más de 20 millones a financiar estos centros que segregan por sexos

La consejera de Enseñanza, Irene Rigau, no tiene previsto eliminar los conciertos educativos a las escuelas de élite, que incluye aquellos centros que separan por sexos a los alumnos. El gobierno catalán subvenciona estos centros desde 2001 y los renovó en 2010, a pesar que la Ley de Educación de Cataluña (LEC) no lo permite. Entonces, el PSC –que controlaba la cartera educativa- justificó que a estos centros no se les exigiría la escolarización mixta porque no figuraba como requisito cuando se les otorgó por primera vez.

Los partidos de izquierda hace tiempo que reclaman a Rigau que acabe con estas subvenciones, que se otorgan a unas 15 escuelas y ascienden a unos 20 millones anuales, en un momento de dificultades económicas. La oposición pide que el dinero liberado con esta supresión de los conciertos se destine a becas comedor o a las guarderías. Hasta ahora Rigau había evitado pronunciarse claramente sobre esta renovación en 2014, pero este lunes ha dejado clara su postura. “No entiendo que aquello que se aprobó en la LEC se quiera cambiar. La concertación que hay ahora da una buena respuesta, otra cosa es que ideológicamente no guste q separen niños de niñas”, ha asegurado la consejera en una entrevista a Catalunya Ràdio.

“Los alumnos tienen derecho a la educación gratuita, tanto los de clase alta como los de media. Y eso puede hacer en la pública o concertada. El coste es el mismo para un alumno de Pedralbes que de Sant Martí”, ha justificado la consejera, que ha avanzado que “ve difícil que los conciertos disminuyan”. Rigau ha recordado que, según la normativa, se debe dar el concierto a todas las escuelas que lo pidan y cumplan los requisitos, básicamente tener un mínimo de alumnos y seguir los preceptos pedagógicos que marca el Departamento.

Rigau ha asegurado que la decisión definitiva sobre estas escuelas todavía no se ha tomado, porque falta debatirlo en el seno del gobierno catalán. Con todo, ha lamentado la “confusión” creada alrededor de ellas. “Normalmente son centros que se identifican con el Opus Dei y entonces crea una confusión y una etiqueta”. Precisamente, uno de los defensores de los conciertos a estas escuelas, Antoni Arasanz, expresidente de la Federación de Asociaciones de Escuelas Libres (Fapel), se convirtió en asesor de Rigau en 2011, cuando esta asumió la responsabilidad educativa.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_