Más de 200 bomberos privados se concentran pidiendo la homogeneización
Los empleados reclaman la homogeneización de las condiciones laborales El próximo sábado, 6 de septiembre, comenzarán una huelga indefinida
Un humo denso y de color rojo, bengalas y estruendos de cohetes asolaban este mediodía la sede de la Dirección Xeral de Emerxencias en Santiago de Compostela. Tras una breve marcha desde el estadio de San Lázaro, a apenas un kilómetro de distancia, más de 200 bomberos de todos los parques de gestión privada de Galicia -datos de los organizadores- ataviados con camisetas de protesta y cascos amarillos y rojos se han concentrado ante las puertas de este edificio de la Xunta para reclamar la homogeneización en los 23 parques de gestión privada de la región. "Estamos hartos de esperar", gritó Carlos Sayar, bombero de As Pontes (A Coruña) a través de un megáfono. Tras sus declaraciones, aplausos, silbidos y más bengalas apoyaban su entrada en el edificio para hacer oficial la queja ante la administración. Piden la ejecución de la Lei de Emerxencias (5/2007) en la que se establece, en su disposición adicional tercera, un plazo de tres años para homogeneizar los servicios y un año para elaborar el estatuto del bombero. Por ahora, seis años después, nada de esto ha llegado, según comentaban los bomberos. El próximo día seis de septiembre, tras subsanar un defecto de forma que detectaron en la anterior convocatoria, comenzará una huelga indefinida secundada por los 23 parques privados de Galicia y que afectará a unos 420 trabajadores. "Queremos hacer las cosas bien", comentaba uno de los bomberos de primera fila mientras sostenía una pancarta que reivindica la homogeneización.
Hay 31 parques de bomberos en Galicia de los cuales 23 son gestionados por siete empresas privadas diferentes. Los ocho restantes son municipales excepto el de Silleda (Pontevedra), que tiene carácter comarcal y el coste de su mantenimiento es "bastante inferior" -más de 100.000 euros anuales según los bomberos- al de cualquier parque de gestión privada, comentaba Carlos Sayar. Hace ya un mes, siete parques de la provincia de A Coruña anunciaron una huelga indefinida por cambios en los servicios mínimos, paro que la empresa gestora, Veicar, tildó de "fantasma" por el "nulo seguimiento". Los oficiales pedían, entre otras cosas, cinco bomberos como mínimo atendiendo así a unas recomendaciones de la Unión Europea (dos para seguir el incendio, dos para los rescates y uno o dos para el control de materiales y la coordinación), según Martín Rudiño, oficial del parque de Boiro (A Coruña). La empresa les ha puesto tres. "Somos tres bomberos para una media de 120.000 habitantes", exclamaba Rudiño casi asustado. "Eso es inviable porque hay una empresa privada que se está llevando un beneficio". Son los bomberos los que afirman que es la propia empresa la que fuerza a que "irremediablemente" la huelga se siga poco. "Cogen a la gente de refuerzo para cubrir a los que están de baja", afirmaba Óscar Regos, secretario del comité de empresa de Veicar.
"Es una pena que el señor Villanueva (director xeral de emerxencias) no estuviera. Pero nos han atendido muy amablamente los administrativos", ironizaba Carlos Sayar cuando salía del edificio tras entregar las peticiones a la administración. Otra de las demandas, que según los oficiales llevan ya varios años exigiendo, es el cambio de turnos. Hasta ahora, los parques tenían turnos de ocho, 12 o 24 horas, dependiendo de la empresa y la provincia. Hoy, lo que demandan los bomberos es homogeneizar los horarios a 24 horas. "Para todos", comentaba el portavoz. "Es como si un cirujano deja la operación a mitad hasta que venga el siguiente médico y continúe con ella", comparaban los bomberos.
Disposición adicional tercera
1. La Xunta de Galicia, a través de la consellería competente en materia de emergencias y protección civil, impulsará las acciones necesarias para homogeneizar en el plazo de tres años las prestaciones y condiciones de trabajo en todo el territorio de Galicia de los servicios de prevención y extinción de incendios y de salvamento a que se refiere el segundo párrafo del apartado 2 de este artículo.
2. La Xunta de Galicia procederá, en el plazo de seis meses desde su puesta en funcionamiento, a la elaboración de un plan director de los servicios contra incendios y de salvamento que definirá el modelo de reordenación territorial y la estructura operativa de los mismos.
En este sentido, la Xunta impulsará la creación de los consorcios provinciales en cuya gestión y financiación participen las diputaciones y los municipios de más de 20.000 habitantes que no tengan parque propio y la propia Xunta de Galicia.
3. En el plazo de un año desde la aprobación de la presente ley, la Xunta de Galicia, mediante propuesta de la consellería competente en la materia, promoverá la elaboración de un reglamento del bombero profesional y del voluntariado.
Los bomberos que trabajan en parques de gestión pública cobran más -unos 500 euros- que los privados. "Yo cobro 1.100 euros mensuales", afirmaba un bombero de A Coruña. "Pero no reclamamos mejoras salariales", matiza. "Solo venimos a reclamar la homogeneización de las condiciones laborales y sociales", insistía los portavoces por unanimidad. Sin embargo, en el escrito que han entregado a la administración esta mañana sí se hace referencia a las condiciones salariales.
Homogeneizar significa también llevar los mismo uniformes, utilizar las mismas frecuencias de radio -hasta ahora, a los bomberos se les entregaba un móvil de empresa desde el que solo podían llamar a cinco o seis números-, protocolos de actuación y hasta formación. "Hay parques que hacen la formación online", comentaba Rudiño, bombero de Boiro. "Esto no se ve en otra parte del mundo", declaraba. "La formación de un bombero tiene que ser fundamentalmente práctica", añadió. Su tono de voz se volvía algo más serio mientras se quitaba el casco amarillo del uniforme para hablar. "Si queremos formación práctica lo pagamos de nuestro bolsillo, tenemos que desplazarnos a otros parques y coger días de nuestras propias vacaciones", comentaba indignado.
Hoy, dos grandes incendios permanecen activos en Oia (Pontevedra) y Ribeira (A Coruña) calcinando en total más de 2.175 hectáreas. "Esos incendios sí se están cubriendo", afirmaba. A los bomberos en huelga se les crea un dilema porque afirman estar preocupados por la gravedad del fuego, decían, y por sus compañeros. "No podemos dormir, la situación es muy jodida", exclamaban algunos de los portavoces. Ellos no están allí, pero sí sus compañeros. "Nos mandamos mensajes por el móvil y whatsapps de apoyo constantemente", concluyeron.
