_
_
_
_
_

Los bomberos de Santiago ratifican que hubo fallos de coordinación en Angrois

Testigos en la catástrofe confirman que el puesto de mando avanzado de la Xunta tardó dos horas en llegar y que no se movilizó a los parques públicos de las ciudades

En un extenso informe de 15 folios remitido a los medios de comunicación, los bomberos de Santiago constataron ayer la descoordinación de los distintos cuerpos que participaron en el rescate de los heridos y fallecidos en el tren Alvia, el pasado 24 de julio. El documento firmado por los tres sindicatos señala que las tareas de auxilio en las vías de Angrois fueron eficientes por la autoorganización de los profesionales y voluntarios que allí trabajaron pero subraya también graves errores en el dispositivo y también vulneraciones del Plan Territorial de Emerxencias de Galicia (Platerga). El relato de fallos es similar al que constata el parte confidencial del servicio 112 publicado por este diario y que revelaba entre otras cosas que el puesto de mando avanzado de la Xunta tardó en llegar al lugar del siniestro 106 minutos, que un helicóptero movilizado por las urgencias sanitarias no llegó a despejar porque se encontraba averiado en la base y que además los bomberos privados tuvieron problemas de comunicación con los de los parques públicos de las ciudades.

Según el informe de los bomberos de Santiago, el responsable de movilizar el camión con el puesto de mando avanzado, un vehículo tecnológico preparado para centralizar todas las llamadas durante una crisis, estaba en As Pontes. Se trata de un trabajador de una subcontrata, Natutecnia, que también gestiona algunos parques de bomberos privados. Dada su lejanía, se acabó llamando a otro chófer de A Baña que tuvo que desplazarse hasta A Estrada a buscar camión. El resultado es que durante las dos primeras horas tras el accidente, ese puesto de mando avanzado no estuvo operativo.

La Xunta alega que el director general de Emergencias de la Xunta, Santiago Villanueva, ejerció como mando único desde el lugar del desastre apenas un cuarto de hora después del descarrilamiento y que lo hizo “como pudo a través de teléfonos móviles”.

Los testimonios de los bomberos ponen en duda que existiera el mando único. Este colectivo profesional censura que pese a estar “supuestamente activado” el nivel dos de alerta de Platerga, no se valoró la posibilidad de activar a servicios de emergencias públicos como los de Pontevedra, A Coruña y Vigo con más medios y experiencia que los efectivos de los parques comarcales privados, a los que se recurrió.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_