_
_
_
_
_
MANUEL TOMAS. Director general de CulturArts

“La sostenibilidad de la cultura requiere procesos como los ERE”

CulturArts es un debate de ideas, quien sea leal a eso tiene cabida, asegura su responsable

Ferran Bono
Manuel Tomás, en los jardines de la Consejería de Cultura.
Manuel Tomás, en los jardines de la Consejería de Cultura. TANIA CASTRO

Procede del mundo de la educación musical donde obtuvo buena nota como director 11 años del conservatorio de Torrent. Ahora, Manuel Tomás (Llíria, 1967) dirige CulturArts de la Generalitat, que aglutina buena parte de las competencias en la materia y acaba de presentar un expediente de regulación de empleo (ERE). De carácter dialogante, reivindica su independencia, aunque no se sale del discurso político oficial. Asegura que “da la cara siempre”.

Pregunta. El compositor Héctor Berlioz escribió que el oboe, instrumento del que es profesor, puede expresar desde el candor hasta el “dolor de un alma en pena”. Tras cuatro meses en el cargo, ¿a qué suena la cultura?

Respuesta. El oboe, como dice ese famoso Tratado de instrumentación de Berlioz, es un instrumento lleno de matices. Ahora, el oboe expresa la esperanza de que la cultura contribuya con esfuerzo y dedicación a mejorar esta situación; y también al esfuerzo y a la dedicación; y la alegría de encontrar aliados en esta aventura que es CulturArts.

P. ¿Se puede contagiar esa alegría a los profesionales de la cultura que padecen la subida del IVA o la reducción presupuestaria?

“El objetivo es satisfacer la necesidad cultural de la ciudadanía”

R. Se puede y se debe. Me gustaría citarle a Fernando Savater cuando dice que en educación, y yo añado en cultura, los pesimistas pueden ser buenos domadores, pero no buenos educadores. El optimismo y la esperanza son una obligación, a pesar de que lamentablemente la gente sufre.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

P. ¿Y para ello es necesario presentar un ERE?

R. Sí, aunque sea una de esas situaciones en las que a uno no les gustaría estar. Hay sólidos informes económicos y organizativos que nos dicen que la sostenibilidad de la cultura pasa por estos procesos como los del ERE que, por cierto, se están realizando en todo tipo de empresas, en medios de comunicación, en sindicatos... Lo que hay es una gran voluntad de diálogo. Apenas se ha dicho que hemos reducido del 40% anunciado al 33%, %, el porcentaje afectado de la plantilla y todo ello antes de sentarnos a negociar [La plantilla total es de 258 trabajadores procedentes de los antiguos institutos de la música, el audiovisual y de la restauración, además de Teatres de la Generalitat]

P. ¿Privatizarán servicios?

R. En la memoria se plantean muchas alternativas, pero hay que ser leales al principio de negociación. Dar por definitivo cualquier planteamiento inicial sería traicionarla.

P. Se ha previsto un ERE también en el Palau de les Arts. ¿Se tendrá en cuenta la familia del PP a la que pertenecen algunos de sus trabajadores o su adscripción política? ¿A cuánta gente afectará?

“La cultura debe favorecer y mejorar el nivel productivo y la empleabilidad”

R. Bajo ningún concepto se puede plantear así. Aún no sabemos a cuánta gente afectará. La idea es hacerlo en breve. Hay que hacer estudios pertinentes. E insisto: un ERE tiene una regulación especifica y no se puede utilizar de manera frívola.

P. ¿Es frívolo hablar de esa situación?

R. No conozco esa situación que usted plantea.

P. ¿Está de acuerdo con la subida del IVA cultural al 21%?

R. Excede las competencias de CulturArts y de la Generalitat. Hay muchos factores a tener en cuenta, como la excepcionalidad económica...

P. Pero usted en un hombre de la cultura...

R. Preferiría que no se hubiera tomado esa decisión, aunque entiendo la necesidad de adoptar medidas tan excepcionales.

P. ¿Cuál es la prioridad de la política cultural valenciana? ¿Se recuperará el circuito teatral?

R. El objetivo fundamental de cualquier política cultural es satisfacer las necesidades culturales de la ciudadanía, lo que implica que los administradores y los que la ejercen sean aliados, pero no destinatarios. La cultura debe favorecer y mejorar el nivel productivo y la empleabilidad. Respecto al circuito teatral, estamos explorando las posibilidades para recuperarlo, dialogando con el sector.

P. ¿Mantendrá a la subdirectora general, Inmaculada Gil Lázaro, criticada por el sector?

R. De momento, todos los subdirectores están prorrogados hasta que se apruebe la Relación de Puestos de Trabajo, antes del 31 de diciembre. CulturArts es un debate de ideas, quien sea leal a eso tiene cabida.

P. Dice que la cultura debe servir a la ciudadanía. Pero una parte de la misma no ha sido atendida. Cuando asumió el cargo, anunció el fin del sectarismo y que todos los artistas tienen cabida en los escenarios públicos. Pero no se han visto resultados tangibles, por ejemplo, con los grupos y solistas valencianos que cantan en valenciano, incluido Raimon...

R. Los músicos valencianos tocan y tocarán en escenarios públicos. Estamos abiertos y mantenemos conversaciones con todos.

P. ¿Me podría decir algún grupo o cantante del colectivo Ovidi Montllor que haya tocado?

R. No quiero dar nombres porque parecería que estoy señalando a alguien por razón de su ideología y no es mi idea. CulturArts hace propuestas globales. En un festival como Ensems, por ejemplo, encontramos artistas muy plurales ideológicamente.

P. ¿El mayor hecho diferencial de la cultura valenciana es la afición por la música?

R. Entre otras cosas. Es evidente que somos uno de los territorios con más músicos per cápita. Tenemos 500 bandas de música; un tejido asociativo que permite que la enseñanza de la música llegue hasta el último rincón del territorio. La transversalidad es una de sus fortalezas. Es un lugar de encuentro de personas de diferente ideología y condición social, entre ricos y pobres, y ya más tarde, entre hombres y mujeres. No conozco ningún lugar en el mundo con algo parecido a lo nuestro.

P. Sin embargo, las bandas de música son muy críticas con la política de los recortes. Usted fue asesor de la Federació de Societats Musicals de la Comunitat Valenciana. ¿Se apoya suficientemente este gran movimiento?

R. El movimiento es crítico muchas veces y hay que asumirlo con normalidad, pero también celebra algunas decisiones de la Administración. Es muy importante seguir apoyando al sector y contar con él, y lo hacemos. El presidente de la federación [Josep Almeria] es miembro del consejo asesor de CulturArts y la Consejería de Gobernación desarrolla otras medidas importantes.

P. La ópera es un gran espectáculo, pero caro. ¿Quién más tiene no debería pagar más? ¿Por qué no hay más mecenas ni patrocinadores entre la burguesía valenciana? ¿Es poco dada a apoyar la cultura, como reza un tópico?

R. Sí que hay patrocinio en el Palau de les Arts, aunque es una cuestión muy importante que debemos potenciar más. En la nueva estructura de CulturArts habrá un departamento para trabajar el encuentro entre lo público y privado. Y necesitaríamos datos más profundos para sostener esa afirmación sobre la burguesía valenciana. A partir del conocimiento podemos encontrar claves que nos ayuden a interpretar la realidad y actuar sobre ella.

P. ¿Cree que se acabará aprobando la Ley de Mecenazgo? ¿Por qué se imponen siempre los criterios más prosaicos?

R. Supongo que se refiere a los criterios del Ministerio de Hacienda frente a los de Cultura. Para mí, debe haber un equilibrio. Como en todo.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Ferran Bono
Redactor de EL PAÍS en la Comunidad Valenciana. Con anterioridad, ha ejercido como jefe de sección de Cultura. Licenciado en Lengua Española y Filología Catalana por la Universitat de València y máster UAM-EL PAÍS, ha desarrollado la mayor parte de su trayectoria periodística en el campo de la cultura.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_