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“La economía social es una alternativa al capitalismo”

María Jesús Reina promueve las empresas basadas en criterios éticos, medioambientales y de igualdad

Ángeles Lucas
María Jesús Reina, vicepresidenta de Feansal, en Sevilla.
María Jesús Reina, vicepresidenta de Feansal, en Sevilla.PACO PUENTES

María Jesús Reina Fernández (Pedrera, Sevilla, 1953) es trabajadora de la economía social desde los 18 años, cuando, en 1971, con un grupo de amigas, decidió crear una pequeña cooperativa de confección textil. Ahí empezó a relacionarse con los movimientos organizativos aún ilegales, en reuniones clandestinas. “Esa cooperativa fue un hito que marcó mi vida profesional”, recuerda. No tiene estudios superiores, aunque confiesa que le encantaría realizarlos. Actualmente es vicepresidenta de la Federación Empresarial Andaluza de Sociedades Laborales (Feansal), presidenta de la Federación Empresarial de Mujeres para la Economía Social y miembro del consejo rector y de la comisión ejecutiva de la Confederación de Empresarios de Economía Social de Andalucía. La Junta ha aprobado esta semana un decreto que destina seis millones de euros al apoyo de este modelo económico, que ya supone el 13% del PIB andaluz.

Pregunta. ¿Las consecuencias del capitalismo han puesto en valor a la economía social?

Respuesta. Tiene que ser así. Ya hemos visto que la forma de funcionar del capitalismo puro y duro es ganar mucho dinero, en poco tiempo y sin escrúpulos de ninguna clase, especulando con el dinero y no produciendo. Esto es lo que nos ha llevado a esta crisis que estamos padeciendo. No digo que la economía social sea la única alternativa, pero sí es una salida importante. Porque nuestra filosofía se basa en criterios de rentabilidad social a la par que económica. Nos basamos en montar empresas para crear nuestros empleos y ayudar a otros compañeros y compañeras a crear los suyos, además de tomar decisiones consensuadas y de trabajar en valores.

P. ¿Y cómo afecta la crisis?

R. Nos afecta, pero la enfrentamos de distinta manera que el resto de empresas porque tenemos más capacidad de resistencia. Nuestro trabajo depende de nosotros mismos, somos todos los dueños de nuestras empresas. Por eso, antes de cerrar o despedir a alguien tomamos medidas conjuntas como trabajar más horas o cobrar menos entre todos. Aguantamos mejor.

Por la unión de toda la izquierda

María Jesús Reina, que también es vicepresidenta de ATTAC (Asociación por una Tasa a las Transacciones Cambiarias para apoyar a los Ciudadanos), es portavoz de la Plataforma Compromiso Social para el Progreso de Andalucía, que está integrada por 24 colectivos sociales de educación, sanidad, consumidores, desarrollo, y dos sindicatos. El pasado 28 de febrero, durante la manifestación del Día de Andalucía, hizo un llamamiento a la unión de la izquierda aplaudido fervorosamente por los asistentes en Sevilla. “Yo no hablo de la unión de partidos de izquierda, voy más allá. Insto a que se una la gente de izquierdas de verdad, los que estamos dispuestos a trabajar y luchar por un mundo mejor. La salida depende de que organicemos con la inquietud trabajar juntos sin protagonismos”, dice.

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P. ¿Qué características tiene la economía social andaluza?

R. De entrada, Andalucía es la comunidad autónoma española con más empresas basadas en economía social. En la región hay 7.126 empresas, más del 60% en el sector servicios, y el 11% en la agricultura. Aunque creo que tenemos un potencial muy importante en el campo que no nos han dejado explotar al máximo. Hay grandes extensiones de tierra que si se cedieran a trabajadores en régimen de economía social, se podría crear empleo. Aquí no distribuimos ni transformamos, no sacamos el valor añadido de nuestros productos. Hay que trabajar en eso.

P. Normalmente, para emprender son necesarios apoyos...

R. Sí, necesitamos apoyos de asesoramiento, y los tenemos de nuestras organizaciones y de la Administración. También requerimos financiación en condiciones asumibles. Somos empresas que nacemos con mucha fuerza, pero con pocos recursos. Ahora, como todos, estamos sufriendo además el corte del crédito de los bancos, aunque se les haya salvado con dinero público.

P. Usted pertenece a un grupo de trabajo para la creación de una banca pública andaluza.

R. La necesitamos para que fluya el crédito de nuestras empresas y para que el ahorro revierta en Andalucía.

P. ¿Y evoluciona la economía social andaluza?

R. Algunas empresas están cerrando, pero otras nacen. Ahora hay muchos jóvenes cualificados que están emprendiendo en nuevas tecnologías. A los jóvenes les gusta nuestra filosofía. También aumentan las iniciativas de empleados despedidos porque sus directivos no conseguían los beneficios deseados.

P. ¿Qué diferencias hay entre los principios cooperativistas que vivió en la clandestinidad y los actuales?

R. Los principios son los mismos: la democracia, las decisiones en consenso, la participación, la solidaridad y el arraigo en el territorio, no es como una multinacional que se desmantela rápido. Quizás lo que haya cambiado es que entonces era algo incipiente y casi prohibido. Nos parecía ilusionante por todo lo que quedaba por conseguir, y hoy se puede ver como algo más normal. Por lo que luchábamos entonces ya se ha conseguido.

P. ¿Y cómo se plantea ahora?

R. Nos seguimos empeñando en basarnos en criterios éticos, de respeto al medio ambiente, de prevención de riesgos laborales, de igualdad...

P. ¿En qué beneficia este modelo a las mujeres?

R. De esta forma, las mujeres no tenemos que enfrentarnos al techo de cristal social y profesional que nos impide ascender. Marcamos nuestras propias metas, y como gestionamos nosotras, es más fácil la conciliación.

P. ¿Y en qué se caracterizan las fundadas por mujeres?

R. La mayoría son mixtas y no conviene diferenciar. Pero en general, arriesgan menos, por lo que resisten mejor; son más flexibles, y promueven el apoyo entre empresas. Representamos el 47% del modelo en la región.

P. Los recortes coartan los derechos sociales...

R. Sanidad, educación, ley de Dependencia... Nos están quitando derechos que nos han costado años conseguir y que han llevado a la cárcel a mucha gente. La sociedad todavía no nos hemos dado cuenta del potencial que tenemos porque estamos alineados con la televisión, el fútbol... y somos incapaces de rebelarnos. En el momento en el que le plantemos cara, tendrán que escucharnos. Salir a la calle sí sirve, es la única arma que tenemos y haría falta que tuviéramos más fuerza.

P. Usted cree en la política.

R. He sido concejal de mi pueblo —Pedrera— 16 años y sé que hay políticos que son muy honrados y con ideales, que luchan sin lucrarse. Aunque a los corruptos habría que castigarlos lo máximo posible para que no ocurra más. Los sindicatos hoy más que nunca son el único instrumento de defensa que nos queda a los trabajadores.

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Sobre la firma

Ángeles Lucas
Es editora de Sociedad. Antes en Portada, Internacional, Planeta Futuro y Andalucía. Ha escrito reportajes sobre medio ambiente y derechos humanos desde más de 10 países y colaboró tres años con BBC Mundo. Realizó la exposición fotográfica ‘La tierra es un solo país’. Másteres de EL PAÍS, y de Antropología de la Universidad de Sevilla.

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