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PARTIDOS

El PSE sondeará un pacto político global con el PNV en su reunión bilateral

Los socialistas pretenden fijar una cuestión de procedimiento antes de abordar temas específicos

Rodolfo Ares, durante su encuentro con los medios informativos.
Rodolfo Ares, durante su encuentro con los medios informativos.fernando domingo aldama

El PSE-EE ha elevado el listón de la agenda que el lehendakari, Iñigo Urkullu, había abierto al promover los encuentros bilaterales del PNV con el resto de los partidos y que, en un principio, se antojaba circunscrita al ámbito de la fiscalidad como elemento básico para allanar el camino a los Presupuestos de 2014.

Así, los socialistas han decidido aprovechar la ocasión para invitar al PNV a fijar una posición estratégica sobre los "principales acuerdos de país". Si bien inicialmente se creía que el primer contacto entre socialistas y nacionalistas, aún por concretar, estaría basado en desbrozar el camino que ambas partes ya han iniciado en materia de fiscalidad, el teórico orden del día de esta futura reunión se vuelve mucho más ambicioso. Según acordó su ejecutiva en la reunión del pasado lunes y que Rodolfo Ares ha detallado en un encuentro con los medios informativos, los socialistas quieren garantizarse un amplio marco político de negociación con el PNV desde el que vigilar los posibles acuerdos puntuales que se alcancen posteriormente en materias relativas a la fiscalidad, al empleo o al impulso económico.

Tampoco debe descartarse en el análisis de este movimiento el intento socialista por comprometer un poco más al PNV a que se decida finalmente por un socio puntual en los asuntos estratégicos de país. Los nacionalistas ya han comprobado su debilidad con la retirada de los Presupuestos y los socialistas se lo van a seguir recordando al tiempo que se ofrecen a "arrimar el hombro" como ha dicho Ares al describir la nueva propuesta de su partido.

Hasta hoy, en el PNV manejan la hipótesis de que los encuentros bilaterales ideados por Urkullu tienen un nítido componente fiscal. De hecho, para adecuar una respuesta encaminada a propiciar un acuerdo, en la reunión del EBB del pasado lunes se cotejaron los posicionamientos del PSE y de EH Bildu en cuestiones relativas al IRPF, el impuesto de sociedades y el fraude fiscal porque suponen las referencias sobre las que ahondar en una próxima negociación. Ahora, en cambio, deberán responder a la propuesta socialista desde una óptica de mayor calado político y que podría desviar el objeto inicial de la invitación sugerida por el lehendakari.

La comisión socialista incluye a sus principales referencias políticas

A tal punto llega el convencimiento del PNV de que la reunión bilateral con el PSE iba a transitar por la senda fiscal que el pasado viernes desde el EBB se pusieron en contacto con uno de los representantes socialistas en la comisión técnica que ambas partes mantienen constituidas durante la negociación presupuestaria para sondear, de hecho, la fecha de un posible encuentro. Ambas comisiones no han reanudado los contactos desde que en Semana Santa los socialistas no respondieron a la propuesta nacionalista siempre en materia de fiscalidad.

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A su vez, el PP también ha entendido la reunión bilateral con el PNV en clave de fiscalidad dentro de un ámbito económico y por eso ha elegido a Antón Damborenea y Juan Antonio Zárate para componer su delegación. Ambos son dos especialistas económicos, al margen de su actual posición en la Mesa del Parlamento y en la Presidencia de las Juntas Generales de Álava. respectivamente.

En cambio, los socialistas han evidenciado el propósito político del encuentro con el PNV mediante la creación de un grupo de trabajo formado por Rodolfo Ares, Idoia Mendia, Txarli Prieto, Iñaki Arriola y José Antonio Pastor, a quienes se podrá unir "cuando sea necesario" el propio secretario general del PSE-EE, Patxi López.

En el fondo, los socialistas temen los efectos de una negociación a más de una banda. Como ejemplo ilustrativo se refugian en el propio ámbito fiscal al recordar que el PNV puede alcanzar fáciles acuerdos con el PP en Bizkaia y Álava, donde tienen muy engrasadas las relaciones, y sus contenidos pueden ser diferentes a los que negocie, en paralelo, con los dos partidos de izquierda, PSE-EE y EH Bildu. En palabras de Ares: "No se puede tratar todo con todos porque defendemos políticas diferentes". Incluso, fue más allá y empezó a ubicar al resto de partidos: "El único objetivo de Bildu es la independencia y el PP apuesta por los recortes".

Por todo ello, el PSE se agarra a una cuestión de procedimiento para esgrimir este tipo de negociación con el PNV, que considera fundamentalmente "política" y que entiende que aporta "seriedad en el proceso" ante la grave situación "en la que nos encontramos", ha apuntado Ares.

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