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Orozco alega que no dimite porque sería “un acto de cobardía”

El alcalde de Lugo, imputado en el 'caso Pokémon', afirma que se siente "acosado" aunque admite que no sabe "por quien"

El auto judicial en el que la instructora del caso Pokémon asegura que hay indicios de que el alcalde de Lugo cobró sobornos de la adjudicataria de la grúa municipal no solo no le han hecho plantearse a Xosé López Orozco la dimisión sino que el socialista no descarta “en absoluto” volver a presentarse a la reelección tras 14 años en el cargo. Orozco asegura que no dejará el bastón de mando porque eso sería una “cobardía”. “Eso me parecería un acto de cobardía. En ese sentido no sé si soy un poco kamikaze, pero hay que pensar lo que es sentirse inocente”, aseguró ayer en una entrevista a la Cadena SER de Lugo.

Preguntado sobre si se siente decepcionado con Francisco Fernández Liñares, que fue concejal de su gobierno y al que los investigadores consideran uno de los presuntos cerebros de la trama de sobornos a políticos a cambio de contratas municipales, el regidor apeló a la presunción de inocencia. “Si es verdad todo cuanto se publica, [me siento] francamente decepcionado, pero tengo que poner la condicional. Si es verdad me sentiría engañado, pero eso hay que comprobarlo fehacientemente y, por lo tanto, tiene que haber una resolución judicial que afirme esto. Mientras tanto, suspender el juicio y vivir en la perplejidad”, esgrimió.

Orozco recordó que ayer acabó el plazo del mes de prórroga del secreto de sumario de la Pokémon, por lo que reclama a la juez que se leventa. “Deseo que la juez atienda la petición que le trasladaron en el escrito mis abogados de que me llame otra vez a declarar y me pregunte por estas cosas que salieron en los medios de comunicación”, expresó el presidente del PSdeG, que dice sentirse “de alguna forma acosado” aunque admite no tener claro “por quien”: “Seguro que hay alguien que habló ante la juez de mí y entonces, creo que tengo derecho a dar mi interpretación y mi interpretación va a ser totalmente negativa. Nunca recibí ningún sobre con dinero, de esta empresa ni de otra”.

Sobre la posibilidad de presentarse a la reelección pese a sus problemas judiciales, Orozco aseguró que ahora mismo no lo descarta, aunque añadió que todavía faltan dos años para los comicios locales: “En política dos años es una eternidad. Ahora estoy metido en seguir trabajando por el Ayuntamiento, seguir trabajando por Lugo y luego ya habrá tiempo de ver lo que hay que hacer”.

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