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El tren del accidente de metro sufrió un tercer descarrilamiento en 1998

FGV negó en los tribunales que la unidad hubiera sufrido siniestros previos Bonig asegura que si hay elementos nuevos que los afectados acudan a los tribunales

La unidad UTA 3736, implicada en el accidente de metro de 2006 en la L-1 de Metrovalencia, que se saldó con 43 muertos y 47 heridos, se vio implicada en un tercer descarrilamiento en 1998 que se ocultó a los peritos judiciales y a la juez que instruyó el caso, según publica este jueves Levante-EMV.

Un maquinista de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) explica al rotativo que la misma unidad que se vio envuelta en el suceso se salió de la vía ocho años antes cuando circulaba a una velocidad de 30 kilómetros por hora entre las localidades de Alberic y Villanueva de Castellón.

El descarrilamiento se produjo en un curva que tenía una limitación temporal de velocidad a 50 kilómetros la hora. "Reduje la velocidad a 30 kilómetros pero el tren descarriló un poco", cuenta el maquinista. No hubo heridos porque el convoy apenas transportaba uno o dos pasajeros.

El relato del maquinista es relevante porque en el primer auto de archivo de la juez Nieves Molina, responsable de la investigación del accidente, se aseguraba que no constaban antecedentes [de siniestros] en la citada UTA. FGV negó al perito judicial y a la juez que investigó la tragedia que la UTA 3736 hubiera sufrido descarrilamientos previos. En el expediente, la compañía pública solo recogió incidencias de materia leve.

La UTA sufrió dos incidentes más en 1994, concretamente entre Massarrojos y Montcada, y en 2003, a la entrada del apeadero de Realón. La Asociación de Familiares de las Víctimas del Metro 3-J exigen desde hace años justicia e insisten en la reapertura judicial del caso.

Sobre la cuestión ha sido preguntada este jueves la consejera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel  Bonig, quien ha indicado que si alguien considera que hay elementos nuevos en el accidente de Metrovalencia que "acuda a los tribunales".

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Bonig se ha manifestado en estos términos a preguntas de los periodistas por las informaciones que se han publicado en los últimos días sobre el accidente. La consejera considera que "no hay nuevos elementos", porque lo que se ha publicado en los últimos días "ya se conocía y nadie ha acudido a los tribunales", ha señalado antes de inaugurar la sede de Fecoval en Valencia.

La titular de Infraestructuras cree que el accidente de metro es "una cuestión que está clara judicialmente y que se cerró, aunque ahora parece que alguien intenta volver" a solicitar que se retome la investigación.

Bonig ha afirmado tener "respeto absoluto" por lo que ha invitado a que "si consideran que hay nuevos elementos, que acudan a los tribunales". La consejera ha sido preguntada por los descarrilamientos previos en 1994, 1998 y 2003 que sufrió la unidad siniestrada y ésta ha explicado que desde FGV "se dieron a conocer estas cuestiones -descarrilamientos entre Massarrojos y Moncada, entre Alberic y Villanueva de Castellón, y en la entrada al apeadero de Realón- al comité de seguridad, por lo que se cambiaron los bogies" de esta unidad. Con estos cambios, el tren era "totalmente distinto, pero lo que se ha publicado ya se sabía", ha insistido.

Bonig ha manifestado que "un accidente ocurre por algo, se modifica, y las unidades continúan operando". "Es evidente que esos accidentes ocurrieron, se modificaron y nadie dijo absolutamente nada", ha destacado.

La consejera ha repetido que las informaciones que se han publicado en los últimos días sobre el accidente "no son nuevas porque ya se conocían". "Desde la oposición se está haciendo hincapié en la comisión de investigación, que ya se produjo y acabó", ha apuntado, al tiempo que ha recordado que "hay tres sentencias que archivan el proceso penal y finalizan con el procedimiento judicial donde no fue nadie FGV a declarar".

Bonig ha repasado que la juez tuvo en cuenta los informes de la policía judicial de la unidad de grandes accidentes ferroviarios, "por lo tanto gente ajena a FGV", y se tuvo en cuenta además a un perito judicial que "designó la propia juez". La consejera ha señalado que en el recurso que se interpuso, "la Audiencia Provincial volvió a confirmar que la causa del accidente fue el exceso de velocidad y esa es una realidad".

"Puedo entender perfectamente a los familiares de las víctimas y a las víctimas, pero la oposición insiste cuando hay una realidad judicial", ha finalizado.

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