La cooperativa de L’Aldea generó facturas falsas por 4,2 millones de euros

El administrador concursal de la cooperativa de l'Aldea (Baix Ebre), Mariano Hernández, ratificó este viernes ante el juez la existencia de alrededor de 4,2 millones de euros en facturas falsas en la contabilidad de la entidad entre los ejercicios de 2008 y 2011. La sección de crédito de la cooperativa de l'Aldea, municipio de 4.376 habitantes, entró en quiebra y bloqueó las cuentas todos sus clientes en diciembre de 2011 creando un auténtico corralito en la localidad. La medida afectó a 1.190 depósitos con un valor de 5,2 millones de euros, lo que a la práctica acabó salpicando a 3.000 vecinos.

Hernández declaró este viernes durante más de cinco horas como testigo en el juzgado de Instrucción número 1 de Tortosa (Baix Ebre), que instruye la causa abierta tras denunciar el caso la actual junta rectora de la cooperativa. Hernández reiteró la existencia de una contabilidad ficticia, como ya especificó en un informe enviado en julio de 2012 al juzgado Mercantil de Tarragona que tramita el concurso de acreedores de la entidad. La supuesta simulación permitió, según Hernández, cerrar los ejercicios con beneficios aunque el organismo estaba registrando pérdidas.

“Hemos conseguido la evidencia requiriendo a los que aparecen como clientes, básicamente son todos extranjeros, holandeses y belgas, y ellos nos han contestado diciendo que saben quienes son los de la cooperativa”, expresó el administrador concursal al término de su declaración. La juez ha pedido a Hernández que entregue en un plazo de cinco días documentación que acredite la existencia de las facturas falsas. El administrador concursal, a su vez, recrimina a la Generalitat no haber actuado. “Es una dejación de funciones clarísima, sabes que está ocurriendo algo y aún así no haces nada”, explicó Hernández. En un inicio, la cooperativa interpuso la denuncia contra el exgerente de la entidad, Daniel Ferré, a quien acusan del colapso, pero en la actualidad hay una ristra de imputados. Entre ellos se encuentra el exdirector general de Política Financiera de la Generalitat, Ramón Sicart, dos inspectores del ejecutivo catalán, la empresa auditora BDO, el expresidente de la cooperativa, además de hijos de Ferré y otros dos miembros de la antigua junta de la cooperativa.

La Asociación de Afectados por la Cooperativa de l'Aldea, que agrupa a más de 60 vecinos y empresas, se presentará como acusación particular en el proceso. En marzo de 2012 una auditoría ya detectó irregularidades graves y facturas falsas en las cuentas de la cooperativa de l'Aldea. En concreto, se hallaron facturas falsas por valor de miles de euros entre 2010 y 2011. Algunas ascendían a 20.000 y otras eran de 10.000 y 3.000 euros, según explicaron los afectados.

De momento el corralito parece no tener fin en L'Aldea. Hasta 4,7 millones de euros de entre 250 y 300 cuentas bancarias siguen bloqueadas. Se trata de los ahorros conseguidos durante toda una vida dedicada a la agricultura o las ganancias de pequeños contratistas, empresarios e industriales, que trabajaban con la entidad agrícola. No hay fecha para la devolución de su dinero y las perspectivas más optimistas, en el caso de que la cooperativa siga produciendo verduras y no se liquide, sitúan la recuperación de los ahorros tras las pertinentes quitas en un plazo de 15 o 20 años.