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“Hoy me saco una espina clavada hace más de 70 años”

Los familiares reciben en el salón de plenos de Massamagrell los restos de fusilados del franquismo exhumados de la fosa común de Paterna

Cristina Vázquez
Josefa Celda recibe la caja con los restos de su padre, fusilado en Paterna en 1940, ayer en el Ayuntamiento de Massamagrell.
Josefa Celda recibe la caja con los restos de su padre, fusilado en Paterna en 1940, ayer en el Ayuntamiento de Massamagrell.JOSÉ JORDÁN

“Hoy \[por ayer\] me saco una espina clavada en mi cuerpo desde hace más de 70 años”, declaró ayer emocionada Josefa Celda al recibir en el salón de plenos del Ayuntamiento de Massamagrell la caja con los restos de su padre José, fusilado al inicio de la dictadura franquista y enterrado hasta su exhumación en la fosa común del cementerio de Paterna. La familia descansará cuando lo entierre este domingo, 14 de abril, coincidiendo con el aniversario de la proclamación de la República.

Con 81 años, Josefa no fue la única que recuperó lo que resta de su padre, fusilado en septiembre de 1940 en el paredón situado a pocos metros de lo que hoy es el camposanto de Paterna. Los familiares de Ramón Gandia Belda y Francisco Fenollosa Soriano también recibieron lo que ha quedado de ellos. Ha costado tiempo, pero desde la aprobación de la Ley de Memoria Histórica se han conseguido exhumar los cuerpos de casi una decena de víctimas del franquismo en la Comunidad Valenciana sepultados en fosas comunes, recordó ayer Matías Alonso, del Grupo de la Memòria de la Fundació Societat i Progrés. “Más de la mitad de los fusilados en aquella época fueron concejales de Izquierda Republicana, del PSOE, comunistas o miembros de la UGT”, cuenta Alonso.

Los restos de otros nueve cuerpos recuperados e identificados de la misma fosa de Paterna volverán el domingo al mismo lugar del que salieron tras un homenaje porque o no se han localizado a los familiares o estos no se han hecho cargo de ellos.

“Mi padre se lo merecía todo. Lo mataron siendo inocente y esta es la mejor manera de demostrar que no le he olvidado”, recordó Josefa con las rodillas temblándole mientras repasaba todos los pasos que ha habido que dar para recuperar los restos de su padre, al que, como recordó, vio por última vez cuando tenía siete años. “Me llevaron a verlo y me dijeron que no llorara delante de él y ya no he podido llorar nunca”, rememoró ayer. El acto transcurrió en el Ayuntamiento de Massamagrell, gobernado por el PP, y contó con la participación activa de partidos de la oposición, como el PSPV, EU o Compromís. Los familiares que ayer recibieron los cuerpos de los fusilados “cierran por fin una etapa de su vida”, dijo Alonso.

El representante de Societat i Progrés explica que estos serán probablemente los últimos cuerpos recuperados al amparo de la Ley de Memoria Histórica. “Una ley que ha permitido que personas sin recursos puedan recuperar a los familiares víctimas de la dictadura durante los años de 2007 a 2011”, apostilló Alonso. Ramón Gandia fue enterrado por la tarde junto a los restos de su esposa Amparo en Massamagrell y el tercer entierro, el de Francisco Fenollosa, tendrá lugar el día 17 en el cementerio de Puçol.

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Sobre la firma

Cristina Vázquez
Periodista del diario EL PAÍS en la Comunitat Valenciana. Se ha ocupado a lo largo de su carrera profesional de la cobertura de información económica, política y local y el grueso de su trayectoria está ligada a EL PAÍS. Antes trabajó en la Agencia Efe y ha colaborado con otros medios de comunicación como RNE o la televisión valenciana À Punt.

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