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Hallada ahorcada una mujer china tras el secuestro exprés de su familia

Los agentes sospechan que no es un suicidio sino obra de las mafias chinas

F. Javier Barroso

“Ven rápido, ven rápido, que mi mujer está muerta”. Eso es lo que dijo el marido de Lili Dai, una mujer china de unos 40 años, al vendedor de una inmobiliaria especializada en clientes orientales. La víctima se había ahorcado justo un día después de que sus padres y su hija de 12 años fueran secuestrados en su chalé de Aravaca. La policía ha abierto una investigación para tratar de esclarecer lo ocurrido, ya que cree que no se trata de un suicidio como parecía en un primer momento y piensa que tras la muerte pueden estar las mafias chinas.

Los padres y la hija de Dai fueron secuestrados en su chalé de Aravaca a principios de semana. Entraron varios encapuchados (algunas fuentes hablan de dos). El mensaje que le dijeron a la mujer era claro. Tenía que pagar tres millones de euros para volver a ver con vida a sus familiares. Dai acudió con su marido a la policía, que puso en marcha todo el operativo de secuestros. A las pocas horas, los agentes lograron liberar a las víctimas y detener a sus captores.

Eso sí, el caso no está cerrado y los agentes de las Brigadas de Policía Judicial y de Extranjería que lo investigan esperan arrestar en los próximos días a más personas relacionadas con el secuestro. Creen que hubo gente vigilando a la familia y que sabía que podía desembolsar una cantidad tan alta.

La liberación de los secuestrados no había casi terminado cuando fue hallado el cadáver de la mujer. Fue el marido el que la encontró ahorcada en un chalé situado en el número 10 de la calle de Val de Almendros, en la urbanización Fuente del Fresno, a la altura del kilómetro 23 de la autovía de Burgos (A-1), en el término municipal de San Sebastián de los Reyes.

Fue el vendedor de la inmobiliaria el que acudió al chalé y comprobó la veracidad de lo que le había dicho el marido de Dai. Después avisó a la policía, que mandó al lugar a agentes de Homicidios y de Policía Científica. En principio parecía un suicidio, pero los agentes han abierto una investigación ya que no descartan que alguien la matara y simulara su muerte. El cuerpo fue trasladado al Instituto Anatómico Forense, en la Ciudad Universitaria, donde ayer le practicaron la autopsia. Ningún familiar o conocido suyo había acudido ayer por la tarde a este centro para reclamar el cuerpo.

Los agentes han centrado sus pesquisas en que el secuestro y la muerte estaban relacionados y que detrás estén las mafias chinas que se dedican a extorsionar a los empresarios asentados en Madrid.

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Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

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