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David Díaz: “Deberían ser castigados”

CatalunyaCaixa se las vendió como "una cuenta a largo plazo con poco riesgo"

David Díaz, en la terraza de su casa de Sant Vicenç dels Horts.
David Díaz, en la terraza de su casa de Sant Vicenç dels Horts.MASSIMILIANO MINOCRI

David Díaz, de 37 años, adquirió las preferentes en 2010. Se las vendieron como “una cuenta a largo plazo para clientes que buscaban poco riesgo”. Díaz afirma que, cuando un tiempo después contactó con los abogados que le llevaron el caso, se enteró de que el procedimiento había estado lleno de irregularidades desde el primer momento en que firmó los papeles.

No vio nunca una copia ni firmó el test de idoneidad que le permitía comprar este complicado producto financiero y en los documentos que le dieron nunca le advirtieron del riesgo que podía comportar.

El hecho de tener solo parte de sus ahorros atrapados en este producto le permitió costearse un abogado y los gastos judiciales para tratar de recuperar los 6.000 euros inmovilizados. Aun así, pocos días antes del juicio que se debía celebrar a finales de marzo, CatalunyaCaixa aceptó un acuerdo por el que le devolverán el 100% de lo que colocó en estas participaciones.

Una de las cosas que más le sorprende es que no tenga derecho a compensación por haber sufrido este engaño. “Si robara un banco y me cogieran no bastaría con devolver el dinero, tendría otro castigo. Pues esto es lo mismo. Los bancos deberían ser castigados”, sentencia.

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