Cientos de preferentistas llevan su protesta al congreso del PP de Pontevedra
Las fuerzas de seguridad cortan todos los accesos al recinto donde se celebra el acto en Silleda En muchos puntos hay más agentes que manifestantes, en su mayoría jubilados
Cientos de afectados por las preferentes han llevado este sábado su protesta a Silleda (Pontevedra), en su anunciada estrategia de presión sobre Alberto Núñez Feijóo y los demás dirigentes del PP gallego, que habían trasladado ahí el congreso provincial en un intento precisamente de esquivarlos. Los manifestantes, muy dispersos, se han visto en muchos puntos superados por la presencia policial, que ha cerrado todos los accesos al recinto ferial donde se celebra el acto y ha vallado y acordonado zonas de monte para evitar que nade se acerque a los políticos.
En alguno de los accesos al recinto había cerca de 30 guardias civiles apostados para controlar a un número similar de manifestantes, la mayoría jubilados que se han hecho notar con pancartas y pitos desde cerca de las diez de la mañana. Incluso un helicóptero de las fuerzas de seguridad ha sobrevolado la zona. No se han producido incidentes destacables.
Mientras, dentro del recinto, el presidente de la Xunta, ha hecho una alusión a los afectados. Según Feijóo, los que se lavaron las manos cuando se emitieron las preferentes ahora se las frotan usando a los afectados como arma arrojadiza contra el PP, informa Cristina Huete. También se ha comprometido a trabajar para que el 100% de afectados recuperen ahorros, después de que el día anterior aún se aferrara a la vía del arbitraje para tratar de contener la ira de los preferentistas.
El PP llevaba preparando meses el congreso para la reelección de Rafael Louzán como líder provincial. Este viernes decidió trasladar el acto desde Pontevedra al recinto de la Semana Verde de Silleda, donde es mucho más sencillo establecer controles de acceso. Louzán ha quedado marcado además, como el máximo antagonista de las plataformas de preferentistas desde que empezó a hablar de los afectados como de “comandos”.
El propio presidente del PP y de la Diputación de Pontevedra reconoció este viernes que el cambio de sede se llevaba rumiando desde hace días. “La comisión organizadora tomó la decisión para que no hubiera problemas de orden público”, justificó el líder provincial de los populares, que previsiblemente será reelegido hoy. Acto seguido reiteraba que manifestarse es “legítimo, porque estamos ante una estafa a miles de personas”. Admitió, en cualquier caso, que “seguramente” haya afectados que aparecerán hoy en Silleda. Varias plataformas cambiaban sus planes de viaje ayer para confluir con los populares. “Nos costará más dinero el autobús, pero iremos igual”, señalaba un afectado del sur de la provincia.
