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La Junta se da de plazo hasta el verano para pactar al nuevo director de RTVA

El PP arremete contra la reforma urgente de la norma mediante decreto ley

Lourdes Lucio
Susana Díaz, consejera de Presidencia.
Susana Díaz, consejera de Presidencia.García Cordero

¿Cuánto va a durar la situación de interinidad en la Radio Televisión de Andalucía (RTVA)? La respuesta a esta pregunta la tienen desde el martes los tres grupos parlamentarios andaluces, una vez que el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía recogerá este miércoles el cese a petición propia de Pablo Carrasco como director general de la empresa pública. El Gobierno andaluz se ha propuesto que antes de las vacaciones de verano haya un acuerdo y el Parlamento pueda elegir un director general con respaldo de todos, según dijo la consejera de la Presidencia, Susana Díaz.

La inesperada marcha de Carrasco a año y medio de la finalización de su mandato —conocida hace una semana— obligó este martes al Consejo de Gobierno a aprobar a toda prisa un decreto ley de modificación de la norma de RTVA. La reforma consiste en dar poderes al consejo de administración del ente para que asuma las funciones de la dirección general. A su vez, el consejo podrá delegar en directivos de RTVA determinadas funciones ligadas al día a día con la gestión. Las decisiones en el consejo que preside el socialista José Moratalla se tomarán por mayoría absoluta, por lo que los ocho consejeros del PSOE no necesitarán de los seis representantes del PP ni el único de IU para hacer y deshacer. El consejo mantendrá una reunión el viernes.

El nuevo hombre fuerte de RTVA como subdirector general es Joaquín Durán, un veterano de la casa que hasta ahora ejercía de director de la Canal Sur Radio. Asume también la dirección de Canal Sur Televisión. Cuando en 2008 se cambió la ley —a rebufo de lo que se hizo en RTVE por decisión de Zapatero— para que el Parlamento eligiera por mayoría cualificada al directivo, el PSOE se dividió en dos. El entonces consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, apostó por el socialista José Miguel Salinas y el anterior número dos del PSOE, Luis Pizarro, con el apoyo del hoy portavoz del Gobierno, Miguel Ángel Vázquez, por Durán. Ante la división, Manuel Chaves eligió a Carrasco.

Durán vuelve a ser la apuesta favorita de los socialistas para ejercer la dirección general los próximos seis años y no solo para este periodo transitorio, según algunas fuentes, pero el PSOE necesita obligatoriamente del apoyo de los 50 diputados del PP. En Izquierda Unida, su socio de coalición, este debate no se ha abierto y el peso de Comisiones Obreras —el sindicato mayoritario en RTVA— no será menor en su toma de posición.

El Partido Popular no participó en la votación del consejo de administración de la semana pasada en la que se eligió a Durán como subdirector general lo que ya deja a las claras que no está por facilitar esa salida. Ayer, además, la diputada del PP Carolina González Vigo descalificó el “decretazo” del Gobierno como parte de una “operación política” para nombrar a un director a “la medida”.

La ley exige que el directivo sea elegido en primera votación por dos tercios de la Cámara (72 votos) y por tres quintos (65) en segunda. En ambos casos son necesarios los votos de los populares. La consejera de la Presidencia, Susana Díaz, trasladó el lunes al presidente del PP, Juan Ignacio Zoido, la apertura esta semana de la ronda de contactos. Díaz se mostró, una vez más, como la máxima defensora de una ley que impone el pacto político para elegir al directivo de la televisión pública.

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Pero habrá que esperar para comprobar si es sincera la posición de los partidos o si ante una situación de bloqueo cambian la ley y eliminan de un plumazo el requisito de la mayoría reforzada.

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