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Trias desdeña al PSC y justifica su pacto de inversiones con el PP

El pleno defiende la Carta Municipal de Barcelona ante el embate de Montoro

Camilo S. Baquero
El alcalde Xavier Trias, momentos antes de iniciar el pleno del Ayuntamiento de Barcelona.
El alcalde Xavier Trias, momentos antes de iniciar el pleno del Ayuntamiento de Barcelona.CARLES RIBES

Convergència i Unió (CiU) y el Partido Popular (PP) mostraron ayer de forma desacomplejada en el Ayuntamiento el pacto que alcanzaron la semana pasada. El alcalde Xavier Trias defendió y alabó el acuerdo de 103 millones de euros en inversiones con los populares. Y, ante los ataques de la oposición de izquierdas, terminó por hurgar en la herida de la división interna de los socialistas. “Un día me obligará a explicar públicamente como ha ido todo esto. Entiendo que todos podemos tener problemas internos pero no nos culpe a nosotros”, le respondió un enérgico Trias al líder del PSC Jordi Martí. Pese a ello, todos los partidos apoyaron la Carta Municipal de Barcelona contra las modificaciones que implica la reforma de Administraciones locales.

La oposición de izquierdas llegó a la sesión con un objetivo claro: cuestionar la supuesta inexorabilidad con la que CiU vende su pacto con el PP. Pero la realidad es otra: Convergència también podía haber pactado con el PSC. Y, en todo caso, la alianza de los nacionalistas con los populares se desmarca de la dinámica en el Parlament donde su ruptura es total. Artur Mas, presidente de la Generalitat, tiene en Esquerra a su socio parlamentario pero al alcalde Trias no le basta con los dos regidores republicanos. Aún así, el jefe de filas de Unitat per Barcelona (UpB), Jordi Portabella, consternado con el acuerdo, propuso deshacer el camino trazado por el popular Alberto Fernández Díaz. Y en forma de proposición, planteó que todos los grupos consensuaran cómo invertir los 93 millones que quedan en la caja. PP y CiU ya acordaron partidas para mercados, las mejoras de rambla de Catalunya y centros sociales.

“Estoy dispuesto a pactar todo lo que sea con tal que la ciudad avance”, aseguró Trias

“Si ustedes pactan con el PP es porque quieren. No es por la inversión. Si quisieran, la podrían aprobar con esta proposición. Esta es la alternativa”, clamó Portabella. La democristiana Sònia Recansens, segunda teniente de alcalde, salió en defensa del acuerdo de inversiones y rechazó la propuesta de Portabella al alegar que estaba fuerza de plazo. El edil del PP Javier Mulleras respondió con algo obvio: que UpB no tiene capacidad de juego en los pactos. Y Fernández Díaz, promotor de que se consignen partidas para el túnel de Glòries, remachó: “Ustedes critican que hagamos un pacto, no su contenido”.

Martí reta al alcalde a que explique públicamente su desacuerdo

La tensión entre CiU y PSC se disparó cuando el líder socialista defendió la existencia de un pacto en la sombra entre los nacionalistas y los populares desde que Trias alcanzó la alcaldía. Martí le invitó a dar explicaciones sobre el acuerdo y, de paso, desgranó la larga lista de proyectos y medidas que CiU ha pactado con el PP. La relación incluye las cuentas y ordenanzas fiscales de 2012, la prohibición de la prostitución callejera, la apertura a la gestión privada de las guarderías, la reforma del Port Vell y el plan de usos de Ciutat Vella. Martí reprochó a Trias que ignorará el acuerdo que firmaron sobre la hoja de ruta de la ciudad y que de prioridad a las grandes inversiones en infraestructuras en lugar de potenciar las de los barrios.

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En su vehemente repuesta, Trias reprochó a Martí la creación de la reforma del Fórum “sin crear vivienda social” y las obras del museo DHub. “Uno se pregunta cómo pudieron planificarlo en plena crisis”, le espetó. Y avisó: “Estoy dispuesto a pactar todo lo que sea con tal que la ciudad avance”. Fue entonces cuando el alcalde le recriminó al PSC su división interna y Martí, ya sin turno de réplica, recurrió a Twitter para responder. “Trias advierte que explicará públicamente por qué no ha pactado las inversiones con nosotros. Lo animo a hacerlo, será esclarecedor”. La desconfianza entre CiU y PSC es ahora abismal. A Trias le sentó muy mal llegar a un acuerdo con Martí sobre la hoja de ruta y que luego fuera desautorizada por la Federación del PSC de Barcelona. Y tanto los partidarios como los detractores de Trias coinciden en que le da mucho valor a la palabra dada. En la Casa Gran, además atribuyen al PSC que bombas como la reforma del Plan de Usos de Ciutat Vella hayan salido a la opinión pública antes de tiempo. Y el PSC ve en Sònia Recasens el principal motivo del distanciamiento. Todos los grupos apoyaron una proposición del PSC que busca salvaguardar la Carta Municipal. Consideran que mina competencias municipales. El PP no apoyó, sin embargo, una declaración institucional.

Pacto en Glòries y desencuentro en Ciutat Vella

CAMILO S. BAQUERO

El pacto de inversiones entre CiU y PP generó una enérgica oposición salvo en un aspecto: todos los grupos están a favor de iniciar el proceso para reformar la plaza de Glòries. Antoni Vives, tercer teniente de alcalde Habitat Urbano, confirmó que se destinarán 15 millones de euros más al proyecto para que las obras del túnel comiencen antes del fin del mandato, en 2015. El líder del PP, Alberto Fernández Díaz, ya había anunciado esta semana que la inversión prevista para reestructurar la plaza se iba a incrementar desde 38,8 millones a 54 millones. La primera cantidad fue la que el Consistorio había puesto sobre la mesa en febrero. De hecho, CiU y PP no solo han pactado obras para este año, sino que también lo han hecho a largo plazo y comprometido inversiones para 2014 y 2015. Es decir, CiU tiene ya hipotecadas con el PP parte de los gastos futuros.

El alcalde Trias anunció también que el próximo mes se reunirá la Comisión Especial para Glòries, dando así su apoyo a una propuesta de Iniciativa, que pide volver al volumen de inversión y al calendario de 2012, que implicaría elevar la partida y acelerar el ritmo de obras.

Si la reforma de las Glòries despertó consenso, no ocurrió precisamente lo mismo en el plan de usos de Ciutat Vella. La pinza CiU-PP se enrocó en defender la construcción de nuevos hoteles en el distrito. "Vamos a mejorar el plan, no a hacer uno nuevo", defendió la regidora del distrito Mercè Homs. La edil aseguró que el cambio es necesario para dar respuesta a la crisis. "Piensen en la actividad que se genera alrededor de un negocio cualquiera", alegó. CiU se agarra a que el anterior plan se realizó sin tener el censo de actividades del distrito por lo que está desfasado. La oposición de izquierdas, por el contrario, defendió la actual norma y se opuso a abrir la veda hotelera. El popular Alberto Villagrasa acusó a Iniciativa de auspiciar un modelo de economía basado en "los locutorios, kebabs y badulaques". En su opinión, eso es lo que provoca que muchos ciudadanos quieran ir al centro de la ciudad. "No puede ser que todos los hoteles estén en el mismo sitio", avisó Jordi Portabella (UpB). La socialista Sara Jaurrieta reprochó a los convergentes que estén tomando todas sus decisiones sin impulsar procesos de participación ciudadana.

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Sobre la firma

Camilo S. Baquero
Reportero de la sección de Nacional, con la política catalana en el punto de mira. Antes de aterrizar en Barcelona había trabajado en diario El Tiempo (Bogotá). Estudió Comunicación Social - Periodismo en la Universidad de Antioquia y es exalumno de la Escuela UAM-EL PAÍS.

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