La lluvia da una tregua y rebaja los niveles de alerta en zonas inundables
Unas 200 personas siguen desalojadas en las provincias de Jaén, Córdoba y Cádiz
La lluvia ha dado una tregua en las últimas horas de este jueves (las previsiones apuntan a nuevas precipitaciones a partir del próximo domingo) y ha permitido rebajar los niveles de alerta en las principales zonas inundables de la comunidad. Con todo, la Junta mantiene activos los planes de emergencia en las provincias de Jaén, Córdoba y Cádiz, donde permanecen desalojados más de 200 vecinos en las localidades de Mogón, Villafranca y Jerez de la Frontera.
En la pedanía jiennense de Mogón, el caudal del río Guadalquivir apenas se alteró este jueves porque han continuado los desembalses desde el pantano de El Tranco, que desembalsa una media de 57 metros cúbicos por segundo. Eso está provocando que la Junta mantenga los desalojos preventivos de una treintena de familias que viven en las zonas más vulnerables, como La Barca y Batanejo, donde la entrada de agua en las viviendas ha provocado daños en los inmuebles. Aún así, el nivel del río descendió ligeramente hasta los 3,75 metros de lámina de agua.
En la provincia de Córdoba seguían evacuados este jueves 40 vecinos de Villafranca, donde el cauce del río Guadalquivir creció el pasado martes en pocas horas a 1.300 metros cúbicos por segundo. Por otro lado, el embalse de Iznájar (el más grande de Andalucía y que afecta a la comarca) aumentó ayer la cantidad de agua desembalsada por lo que Protección Civil incrementó la vigilancia en las zonas que esta acción pueda provocar fuertes crecidas. Vigilarán con más atención Villafranca, Jauja y Lucena, así como en Badolatosa en la provincia de Sevilla y Cuevas Bajas en Málaga.
La línea férrea se interrumpe en Jaén por desprendimientos
Y en Cádiz, el nivel del Guadalete sigue bajando pero continuaban sin volver a sus hogares las nueve familias desalojadas de las barriadas rurales de Las Pachecas, La Corta y los Cejos del Inglés. En la provincia de Sevilla, los vecinos desalojados en Écija pudieron volver ya a sus viviendas aunque ayer se intensificaron las tareas de limpieza y reparación tanto en el municipio como en la Isla del Vicario. Sin embargo, a última hora del miércoles se activó el plan de emergencia de Lora del Río (Sevilla) ante la previsión de anegaciones en las zonas más bajas de la localidad. En total, unos 60 pantanos andaluces, la mayoría de la cuenca del Guadalquivir, permanecen desembalsando.
Y mientras se recupera la normalidad, los Ayuntamientos empiezan a pedir soluciones. El de Écija (Sevilla) reclamará a las restantes Administraciones “todas las líneas de ayuda” posibles. Estudia solicitar la declaración de zona catastrófica y ha decidido instalar en el edificio consistorial una pancarta para reivindicar a la Junta que cumpla su compromiso de reanudar el encauzamiento del arroyo Argamasilla. El Ayuntamiento de Montefrío (Granada) también estudia solicitar al Gobierno la misma declaración por los daños causados por las intensas lluvias, que han destrozado varios caminos rurales propiciando además el desbordamiento del río Milanos, que ha cubierto de agua el puente romano.
Otra de las consecuencias del temporal ha sido que el tráfico ferroviario en la vía Madrid-Cádiz se vio interrumpido entre las estaciones de Vadollano y Vilches, ambas en la provincia de Jaén, como consecuencia de un desprendimiento de tierra. Los pasajeros de los trenes que se vieron afectados fueron transbordados por carretera.
La buena noticia es que la flota pesquera onubense salió a faenar este jueves después de casi dos semanas de amarre forzoso por el temporal de lluvia y viento que ha azotado al litoral de la provincia.
