El PSOE se prepara para una “guerra de basura” del PP por Bárcenas
Rubalcaba celebra su primer año como secretario general en Andalucía
Los líderes federal y andaluz del PSOE advirtieron ayer a los suyos de que se preparen para lo peor en los próximos días por la reacción del Partido Popular ante el caso Bárcenas.A la vista del enroque de este partido y de la catarata de querellas anunciadas por los dirigentes populares por la publicación de la contabilidad del extesorero del PP, los socialistas están convencidos de que ahora dirigirán sus cañones contra ellos. Y que no dispararán con munición de fogueo.
“Ahora empezarán con la basura. No vamos a entrar en esa guerra, nos vamos a defender con firmeza, pero nada de guerra de basuras”, afirmó el secretario federal socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba. Unos minutos antes, el presidente de la Junta y secretario general del PSOE andaluz, José Antonio Griñán, también había lanzado el mismo aviso, aunque de manera mucho más castiza: “Vamos a estar unidos en lo que haya que venir y que lo que venga no sea un guarrindongueo de la derecha”.
Por lo dicho por ambos dirigentes, en el PSOE deben de tener algo más que intuiciones de hacia dónde va a dirigir sus pasos el Partido Popular. El escenario escogido por Rubalcaba y Griñán para poner en guardia a todos sus cuadros y sus militantes fue el comité provincial del PSOE de Sevilla, el primero que se celebra desde que la también consejera de la Presidencia, Susana Díaz, fue elegida secretaria provincial en el pasado verano.
También el día de ayer, 4 de febrero, fue especialmente escogido. Hace justo un año, Rubalcaba fue elegido líder federal del PSOE en un congreso celebrado en la capital andaluza y no precisamente con los votos de los que le precedieron en la palabra. Ni Griñán ni Díaz apostaron por él sino por Carme Chacón. Ahora las direcciones federal y andaluza conviven, aparentemente, en armonía, tras algunos meses de reproches y tensiones que no han contribuido a reforzar el liderazgo de Rubalcaba sino todo lo contrario. Nada de eso está ya en primer plano, aunque lo que ocurra en un futuro en el PSOE está por escribirse. En cualquier caso, desde Ferraz se voceó con énfasis que Rubalcaba cumpliera su primer aniversario como líder del partido en un acto al que le invitó Díaz, y en el que participó Griñán.
Ahora la preocupación es la grave crisis social de España, con unos niveles de paro desconocidos y sin visos de remitir y, también la crisis política institucional. Griñán incluso se permitió aconsejar al PP cómo debía reaccionar ante la corrupción interna. “Que se conviertan en acusación particular, como hemos hecho con el caso de los ERE en el que incluso hemos pedido fianza a los que fueron dirigentes del PSOE”, señaló, en alusión a la decisión de la Junta de Andalucía de personarse en el fraude los expedientes de regulación de empleo pagados con fondos públicos y de reclamar una fianza para el exconsejero de Empleo Antonio Fernández.
También alentó al PP a querellarse contra el que fuera responsable de las finanzas populares durante 20 años, Luis Bárcenas, quien tuvo hasta un pico máximo de 22 millones de euros en una cuenta en Suiza. “O ese dinero es el del PP o se ha enriquecido con el dinero del PP”, subrayó el presidente andaluz.
También quiso Rubalcaba explicar a los suyos los motivos por los que ha pedido la dimisión de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno, una decisión que ha creado desconcierto en algunos dirigentes del PSOE. “En el momento más difícil de España es el presidente con menos capacidad de España”, dijo.
IU quiere prohibir las donaciones de empresas
La ley de Transparencia de Andalucía figura en el calendario legislativo acordado por PSOE e Izquierda Unida en el pacto de gobierno de coalición, pero el caso Bárcenas ha provocado que esta norma cobre un especial relieve. También ha logrado que los partidos digan que se van a tomar en serio la comisión de financiación de los partidos políticos del Parlamento autónomo que desde que se creó en 1993 no ha trabajado en nada en concreto.
El presidente del Parlamento, Manuel Gracia, ha convocado para el miércoles a los tres grupos parlamentarios para activarla. Izquierda Unida desveló ayer algunas de las propuestas que llevará a la mortecina comisión como la de prohibir las donaciones privadas por parte de empresas a partidos políticos.
El coordinador regional de Izquierda Unida y vicepresidente del Gobierno andaluz, Diego Valderas, apostó, a raíz de las donaciones recibidas por el PP que figuran en la contabilidad manuscrita de Bárcenas, por “impedir las donaciones privadas de entidades jurídicas” porque, en su opinión, “el que da algo, lo da a cambio de algo”, informa Efe.
Según él, deben diferenciarse las donaciones individuales, al tiempo que resaltó la necesidad de que los partidos tengan una financiación “totalmente reglamentada”.
Valderas ironizó sobre los sobresueldos en relación a su formación, ya que en IU, dijo, los cargos públicos deben aportar una cuota al partido y pasa lo contrario porque tienen un “menos-sueldo”.
José Antonio Griñán aseguró respecto a los sobresueldos en el Partido Popular que más allá de que estos puedan ser o no ilícitos la cuestión es que “son inmorales”. “Nadie puede cobrar dos sueldos por el mismo trabajo”, enfatizó.
El PP, a través de su responsable de Organización y de Política Municipal, Ana María Corredera, aseguró que acudirán a cuantas reuniones se convoquen para abordar medidas de transparencia. Corredera repitió el argumentario de su partido de que la actuación de la cúpula popular respecto al caso Bárcenas es la apropiada porque se trata de acusaciones "falsas". También aprovechó para pedir la dimisión de Griñán por el caso de los ERE.
La única voz diferente en el PP fue la del alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, quien reprochó a Rajoy que “no saliera antes” a desmentir a Bárcenas, al que tildó de “golfo”.
