Las frágiles ‘líneas rojas’ de EITB

“EITB no se puede escapar”. Habla Iñigo Iturrate, parlamentario del PNV y miembro del Consejo de Administración de la radiotelevisión pública vasca. Y lo que no puede sortear el ente no es más que la crisis, los recortes presupuestarios y una necesaria remodelación y reestructuración. Si las vigas maestras del Estado de bienestar, la sanidad y la educación públicas, ya ven cómo planea la amenaza del ajuste en los presupuestos de este año, “EITB no puede ser menos”, apuntan en el PSE y confirma el PNV.

El nuevo equipo directivo del ente audiovisual tendrá que ser capaz de armar un rompecabezas al que la crisis amaga con o ya le ha comido varias piezas. La primera de ellas, el presupuesto. El consejero de Hacienda, Ricardo Gaztagaetxebarria, anunció hace poco más de 10 días que el techo de gasto de los presupuestos caerá un 11,5% (1.200 millones de euros), con el objetivo de cumplir el límite de déficit pactado con el Gobierno central (el 0,7%) y para ajustar la caída de ingresos tributarios.

En el caso de las sociedades públicas la bajada se precipita en torno al 20% de media, la misma que para las subvenciones y transferencias de capital, el concepto bajo el que el Ejecutivo financia la radiotelevisión pública, con lo que previsiblemente la rebaja de las próximas cuentas de EITB oscile entre esos dos porcentajes.

El último contrato programa firmado entre el Ejecutivo socialista y el ente el año pasado reconoce: “La situación de la profunda crisis económica que padecemos y su afectación a la asignación de recursos públicos, tiene como consecuencia una gran dificultad para prever los ingresos económicos de los próximos años y de no poder garantizar la financiación estable para EITB". La contribución pública al presupuesto total del ente supone un 80%.

“Debemos estudiar la sostenibilidad con la actual dimensión”, admite el PNV

Mientras, la facturación publicitaria de ETB cayó entre enero y septiembre de 2012 en un 23,23% y la de la radio, en un 3,4%, según datos de la propia radiotelevisión pública. Y ello a pesar de la recuperación paulatina de las audiencias a lo largo del último año que han empujado a los tres canales de la televisión vasca a sumar un 14% de audiencia en el primer mes de este año.

La plantilla de EITB vive con preocupación los rumores y posibles consecuencias de la crisis. Y más desde que se hicieron públicas las conclusiones de un informe encargado por el anterior Gobierno en el que se cuestionaba la viabilidad e idoneidad de la sede de Miramón, en San Sebastián, y planteaba también la integración de la oferta de Radio Euskadi y Radio Vitoria.

Dependerá de la evolución de la crisis el que los recortes en las cuentas y la contención de gastos en la programación, entre otros apartados, terminen derivando en una reducción del personal. Sin olvidar, como recuerda uno de los miembros del consejo elegidos por el PP, la herencia de dispendios cometidos en épocas anteriores, como la construcción de la sede de Bilbao.

“A medio y largo plazo tenemos que estudiar la sostenibilidad de EITB con su actual dimensión", concede Iturrate, quien marca como línea infranqueable para su partido la garantía y viabilidad de los dos canales, en euskera y castellano, y el cumplimento de los principios de servicio público, profesionalidad, independencia e impulso de la normalización lingüística que recoge la ley del ente. Y recuerda que el lehendakari, Iñigo Urkullu, “se comprometió a que no iba a ver despidos de empleados públicos”.

El 80% del presupuesto del ente procede de las arcas públicas

Más de 1.000 personas conforman la plantilla de EITB. Su coste en 2011 ascendió a 38,4 millones de euros para los 632 trabajadores que entonces tenía ETB y 16,6 millones para los 289 que conformaban las plantillas de las radios.

Este es el contexto bajo el que Mikel Agirre, nombre propuesto por el PNV para dirigir EITB, tendrá que diseñar su mandato. Antes, al Gobierno le falta recabar el apoyo necesario para que el Parlamento dé luz verde a su nombramiento, que precisa mayoría absoluta (38 votos).

Fuentes peneuvistas reconocen que las negociaciones con el PSE —ambos partidos suman 43 parlamentarios— están “bastante avanzadas”. No descartan tampoco contar con el respaldo de otros grupos de la oposición, si bien el principal, EH Bildu, puntualiza que de momento solo ha mantenido un contacto informal con el PNV al respecto en los pasillos de la Cámara.

Varias fuentes apuntan que Agirre, un hombre de la casa y actual director de Explotación e Ingeniería del ente, sería la persona adecuada para emprender los ajustes necesarios. En un escenario difícil sabría dónde recortar y cómo y, sobre todo, ser capaz de encontrar el consenso de los trabajadores y sus representantes sindicales.