Del folklore canario al fado portugués
El grupo tinerfeño Los Sabandeños actúa este sábado en el Palacio de Congresos de Sevilla
Las cifras que avalan su trayectoria son abrumadoras. Casi medio siglo sobre los escenarios, más de 75 álbumes y alrededor de 1.500 canciones. Tres años después de su última actuación en Sevilla, el grupo tinerfeño Los Sabandeños regresa a la capital con el espectáculo Especial Los Sabandeños, desde Canarias a Sevilla, en el Palacio de Congresos (21.30). “Ni Julio Iglesias ni Raphael han publicado tantos discos como nosotros. Raphael es el que más se acerca”, afirma entre risas el fundador del conjunto, Elfidio Alonso.
Durante hora y media, el grupo interpretará una veintena de canciones de distintos géneros, entre ellos, el folklore canario, el cancionero latinoamericano, el bolero y el fado. “También habrá un hueco para el pop. Queremos acércanos al público joven con temas de Maná, Gloria Estefan o Fito Páez”, aclara Alonso. Junto a las canciones de su último disco A viva voz —recopilación de 14 temas grabados en directo en algunas de las actuaciones de 2012—, el conjunto presentará tres temas nuevos, entre ellos, el fado Lágrima, de Amalia Rodrigues.
El grupo prepara su nuevo disco Patrimonio, homenaje a expresiones artísticas distinguidas como Patrimonio Cultural Inmaterial
Con más de dos millones de discos vendidos, la música de Los Sabandeños ha llegado a más de 30 países, entre ellos, Bélgica, Italia, Estados Unidos, México o Japón. “Los japoneses son una caja de sorpresa, lo mismo te bailan un tango argentino que se arrancan por bulerías. Tienen un sentido musical extraordinario”, afirma el fundador.
El grupo se encuentra en pleno proceso de grabación de su nuevo proyecto Patrimonio, álbum en el que homenajea a expresiones artísticas distinguidas por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. “Cantaremos tangos, copla española y grabaremos la primera canción en silbo gomero, el lenguaje silbado practicado por algunos habitantes de La Gomera”, explica Alonso, quien reconoce que el secreto del éxito del grupo es el no tener unos ideales comerciales. “No vivimos de esto, nuestro único afán es proteger una música popular que es seña de identidad de los pueblos”, agrega.