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Talas y repoblaciones de eucaliptos destrozan seis castros inventariados

La maquinaria pesada destruye 120 metros de fortificación en Mondoñedo

Parapeto defensivo del Coto dos Castros, en el límite entre Mondoñedo y Lourenzá, destruido por máquinas y replantado de eucalipto.
Parapeto defensivo del Coto dos Castros, en el límite entre Mondoñedo y Lourenzá, destruido por máquinas y replantado de eucalipto.Mariñapatrimonio

Medio Rural da permiso a los propietarios de montes para entrar con maquinaria pesada en sus plantaciones, talar extensas masas de eucaliptos y, a continuación, volver a repoblar los terrenos con más eucaliptos, muchas veces variedades híbridas, de última generación, que presentan la ventaja de enraizar y medrar más rápido. La misma consellería otorga licencia para la tala y obliga a reponer los árboles cortados sin comunicarse, según denunciaron ayer Adega y Mariñapatrimonio, con el departamento de Cultura de la Xunta, responsable del inventario de yacimientos arqueológicos. Los dueños de los montes no tienen tampoco por qué saber que sus tierras esconden castros, aunque en buena parte de los casos estos son fácilmente identificables.

El colectivo ecologista y la asociación de defensa del patrimonio cultural de A Mariña lucense acaban de comunicar a la Administración gallega destrozos en seis castros de la comarca provocados por la “industria pesada del eucalipto”. Se trata de los enclaves inventariados por la Xunta de Coto dos Castros (que ocupa un monte entre Mondoñedo y Lourenzá), Coto da Croa (parroquia de Santa Cilla, Foz), Castro Loureiro (Chavín, Viveiro), A Croa (Landrove, Viveiro), Os Castros de San Caetano (Celeiro de Mariñaos, Barreiros) y Os Castros de San Pedro de Viveiro.

Los trabajos forestales, en todos estos casos, se desarrollaron, según los denunciantes, con paleadoras, tractores, grúas y orugas. Se derribaron construcciones castrexas para abrir camino a las máquinas o directamente las orugas pasaron sobre los primitivos parapetos defensivos. En Coto dos Castros, tiraron abajo 120 metros de fortificación arrojándola al foso para allanar el terreno y reforestar encima. Además, los nuevos eucaliptos de rápido crecimiento requieren ser plantados en agujeros más hondos, de dos metros de ancho, y se abrieron sobre los castros. El reciente PXOM de Xove reconoce que de sus 21 yacimientos catalogados y plantados de eucalipto, cuatro ya no existen “como consecuencia de las labores forestales”. Mariñapatrimonio y Adega han denunciado ya 15 casos semejantes desde 2008.

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