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Poca nieve, mucho atasco

Alerta naranja por nieve en el áerea metropolitana y el Henares y amarilla en el resto de la región El día transcurre "tranquilo" en la capital pero Protección Civil advierte de que "puede empeorar" Más de 100 kilómetros de retenciones, sobre todo en la A-6, la M-40, la A-1 y la M-607

Foto: atlas | Vídeo: SANTI BURGOS | ATLAS

La primera alerta por nieve del invierno en el área metropolitana de Madrid está transcurriendo con poco blanco y mucho atasco —más de 100 kilómetros de retenciones en las principales carreteras de la región en hora punta, sobre todo en la A-6, la M-40, la A-1 y la M-607—, en gran parte por la lluvia y porque los conductores han hecho caso omiso a la recomendación de dejar el coche en casa. Aunque la mañana ha sido relativamente "tranquila" en la capital, el subdirector de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior, José Carlos Baeza, ha advertido de que "puede empeorar" a lo largo del día. La alerta es naranja (riesgo importante, el segundo de los tres existentes) en el área metropolitana y Corredor del Henares y amarilla en el resto de la región.

Según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), las nevadas que pueden alcanzar un espesor de hasta cinco centímetros en área metropolitana y el Henares de seis a once de la mañana, aunque precisa que la acumulación de nieve es más probable fuera de los núcleos urbanos. La probabilidad de que nieve en el área metropolitana es sin embargo baja, de entre el 10 y el 40%, pero un portavoz de la Aemet han explicado que se ha preferido prevenir para evitar evitar males mayores.

¿Por qué la capital está en alerta naranja si en la sierra nieva más?

Meteorología explica que el sistema de alertas en España está diseñado en función de los posibles daños a las personas y a los bienes así como lo extraño o habitual del fenómeno, de ahí que el riesgo se considere menor en una zona de montaña, menos poblada y en la que nieva con más frecuencia.

En la capital, es raro una alerta naranja por nieve: el año pasado hubo una, por ejemplo, el 4 de marzo. Ese día, la nieve cortó cerca de cinco horas la A-6 a 19 kilómetros de Madrid y cientos de conductores quedaron atrapados de madrugada, mientras las máquinas quitanieves quedaban atascadas en los accesos a la autovía.

Dos años antes, en enero de 2009, una nevada que cogió por sorpresa a Ayuntamiento, Comunidad y el Ministerio de Fomento. Con Barajas cerrado y la M-40 colapsada, el Consistorio respondió con cortes en la Castellana y recomendando dejar el coche en casa, pero las alternativas no eran buenas. El 70% de las líneas de autobuses interurbanos y el 30% de los recorridos urbanos funcionaron mal. Hubo retrasos de hasta tres horas en las líneas de Cercanías.

Para hoy, la Aemet espera que la mayoría de los madrileños vean una "ligera nevada", aunque subraya que cualquier ligera variación puede hacer que no cuaje o que se acumule más nieve de la indicada.

El resto de la comunidad también está en alerta por la misma causa, aunque el riesgo es menor. La sierra está en alerta amarilla (el nivel más bajo) por hasta ocho centímetros desde las seis de la mañana a la medianoche. El miércoles continuará todo el día en el mismo grado de alerta y se espera que caigan 15 centímetros. En el sur y las Vegas, también alerta amarilla por hasta cuatro centímetros de seis a once de la mañana. Al margen de la nieve, hay alerta amarilla en la sierra por rachas de viento de 80 kilómetros por hora entre las once de la mañana y las cuatro de la tarde.

Tal y como apuntaban las previsiones, sobre las ocho de la mañana ha comenzado a nevar ligeramente en la capital, pero muy poco. Enseguida los copos se han mezclado con lluvia y aguanieve. Desde primeras horas, un leve manto de nieve sí que cubre muchas puntos del norte como Alcobendas y San Sebastián de los Reyes y también del sureste. En puntos de la sierra, como Manzanares el real, ha sido más copiosa.

El tráfico ha sido complicado a lo largo mañana, con una hora punta más densa y langa de lo habitual. Según Tráfico, a  las nueve y media de la mañana la A-6 sumaba más de 20 kilómetros de tráfico lento con paradas en sentido Madrid, con tramos especialmente complicados en Las Rozas  y en Madrid, tanto, que el carril BusVao se ha abierto para todos los usuarios sentido Madrid. Otra de las vías más afectadas ha sido M-40, que sobre esa misma hora presentaba en total 36 kilómetros de retenciones en distintos puntos. La A-1 tenía tres kilómetros de tráfico difícil y se prohibía circular a camiones y vehículos articulados desde El Molar hasta el km 98. Tampoco podían circular camiones y articulados en la M-604 en Rascafría.

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Presentaban también atascos aunque menores otras carreteras principales de la región en dirección a la capital, como la A-42, la M-607 a la altura de Tres Cantos y de Colmenar Viejo, la M-503 en Pozuelo y la M-500 en Madrid, la A-2 a la altura de San Fernando de Henares y en el municipio de Madrid, la A-5 en Móstoles y ya en la capital, la A-4 a su paso por Pinto, la M-12 en San Sebastián de los Reyes, la M-11 en Madrid, la M-50 en dirección A-6, y la M-100 a la altura de Alcobendas. El uso de cadenas es obligatorio para los turismos en los puertos de Canencia, la Morcuera, Navafría, Hiruela, Cardoso y La Puebla.

En la M-30 los atascos que se producen a diario han durado hoy más tiempo y las retenciones han afectado a algunos kilómetros más de lo habitual, ha explicado a Efe el Centro de Pantallas del Ayuntamiento. Lo peor, entre el nudo sur y Manoteras, desde el nudo sur hasta el Puente de los Franceses y en la avenida de la Ilustración, donde el atasco se extendía desde el Ramón y Cajal hasta el barrio de Peñagrande.

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El Ayuntamiento de Madrid ha activado el Plan de Nevadas, en el que participan 6.000 operarios, además de 799 medios mecánicos (máquinas quitanives, esparcidores de sal y baldeadoras). El consistorio ha salado los puntos neurálgicos como parques de bomberos, bases de Samur, centros de salud, comisarías, bocas de metro y ejes comerciales, además de las avenidas principales y calles propensas a la formación de hielo.

El Gobierno regional ha activado el nivel uno del Plan de Inclemencias Invernales y las máquinas quitanieves de la Comunidad están trabajando en las zonas más altas de la región. También están listos para intervenir en Madrid si fuera necesario los operativos de la Guardia Civil y la Dirección General de Tráfico, así como los silos de fundentes, 14.740 toneladas de sal y 128 máquinas quitanieves de Fomento para la la red de carreteras del Estado.

Barajas opera esta mañana a plena capacidad y ha activado todas las actuaciones previstas en el Plan Invernal para minimizar los efectos. El aeropuerto, que tiene programados hoy, 871 vuelos, opera sin problemas y tan sólo se registran alteraciones en algunas rutas con los aeropuertos de Londres-Heatrhow; Lomdon City, Fráncfort y Bruselas, que están afectados hoy por baja visibilidad o nieve. Además de Madrid, están en alerta otras 11 comunidades: Andalucía, Aragón, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla León, Madrid, Navarra, Extremadura, Galicia, La Rioja, País Vasco y Asturias

Consejos ante la nieve

  • Mantenerse informado de la situación en todo momento
  • Usar el transporte público, preferentemente Metro y Cercanías
  • Si no se puede evitar y se coge el coche, ir muy atento al volante y poner especial cuidado con las placas de hielo
  • En calzadas con nieve y hielo evitar el uso del freno. En su defecto, usar las marchas cortas para reducir la velocidad
  • No adelantar y utilizar correctamente el alumbrado
  • Revisar los neumáticos, el anticongelante y los frenos
  • Llenar el depósito
  • Llevar neumáticos de invierno o cadenas
  • Llevar ropa de abrigo y un teléfono móvil con batería de recambio y/o cargador de automóvil.
  • Si está atrapado en la nieve, se aconseja permanecer en el coche, con la calefacción puesta y renovando cada cierto tiempo el aire. Hay que vigilar que el tubo de escape no esté obstruido para evitar que los gases penetren en el interior.
  • En caso de quedarse aislado, no hay que intentar resolver la situación por uno mismo sino pedir ayuda, salvo que la situación sea insostenible, esperar asistencia

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