Juicio a cuatro radicales por intentar asesinar a un menor en Valdemoro

Cuatro jóvenes se sientan desde hoy hasta el próximo 24 de enero en el banquillo de los acusados de la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Madrid. Están acusados de intentar asesinar en Valdemoro el 7 de noviembre de 2010 a un joven, Javier P. G.-C., cuando tenía 16 años. El fiscal pide para cada uno de ellos 14 años de prisión al apreciar los agravantes de alevosía y de uso de disfraz. El ministerio público también solicita una indemnización de 62.765 euros para la víctima por las lesiones causadas.

Los cuatro acusados son Andrés María Fernández Jiménez, de 21 años; el polaco Damian Pawel Dabrowski, de 23; Tamara Fernández Lozano, de 20, y novia del anterior; y Enrique García González, de 22. Todos ellos tienen vinculación con la ideología de extrema izquierda de signo violento antifascista.

La investigación ha concluido que los procesados acordaron por teléfono que dos de ellos apuñalarían al menor, mientras que el resto se quedaría cerca para vigilar y asegurar la huida de los autores materiales. Los hechos ocurrieron sobre las 21.10 cuando los cuatro acusados, a los que se considera coautores, quedaron en el entorno del bar Svyturys en el que Javier estaba viendo el partido que enfrentó al Real Madrid con el Atlético de Madrid junto con amigos. Cuando dejó el local, dos de los acusados se taparon la cabeza con capuchas y bufandas para no ser reconocidos. Le abordaron en la calle de Febo, en el barrio del Restón, y le apuñalaron tres veces. Sin mediar palabra, Andrés María F. J. le asestó, según el fiscal, dos puñaladas en el abdomen, mientras que el otro agresor —no identificado— le apuñalaba por la espalda.

Uno de los acompañantes logró retener por unos instantes al supuesto autor material y descubrirle el rostro. Los agresores salieron corriendo y se subieron al coche con el que habían llegado al lugar, un Fiat Punto negro, a cuyos mandos estaba supuestamente Damian Pawel. Luego huyeron a toda velocidad.

Antes de ser trasladado al hospital, Javier pudo decir a la Guardia Civil que sus atacantes eran sharp (radicales de ultraizquierda) e incluso identificó a Andrés María. El menor estuvo en coma inducido durante varios días a consecuencia de la grave hemorragia que le provocaron las puñaladas. Con anterioridad a estos hechos, en 2009 y en el verano de 2010, el procesado Andrés María F. J. ya se había dirigido al menor, que se define a sí mismo como de ideología franquista-falangista, llamándole “cerdo” o “facha de mierda”, según el escrito del ministerio público. Desde su detención se encuentra en prisión provisional.

Los cuatro procesados tienen vinculación con la ideología de extrema izquierda de signo violento ‘antifascista’. Todos ellos mantenían relaciones de amistad entre sí y, en concreto. Ninguno de los acusados había tenido contacto alguno con el menor agredido, salvo Andrés María.

Durante la instrucción del caso, tanto Javier, como su hermano, que tiene una correduría de seguros en el cercano municipio de Ciempozuelos, han recibido amenazas de muerte y destrozos en el local. Todos ellos han sido denunciados ante la Guardia Civil. Algunos venian firmados un grupo de ultraizquierda denominado Valdemoro Ciempozuelos Antifascista (VCA). Fuentes de la investigación vincularon a Andrés María como uno de los principales dirigentes de este grupo, además de integrar el grupo musical Protervia Madriz.