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El alcalde de Sant Joan pide a cada vecino 25 euros para no abrir un crematorio

Revocar la licencia implica una indemnización de 650.000 euros

Los vecinos de Sant Joan d’Alacant tendrá que aportar 650.000 euros a su Ayuntamiento para que este pueda hacer frente a la empresa que quiere instalar un crematorio en el municipio. “Si los ciudadanos no lo quieren de verdad, vamos a ver si somos capaces entre todos de juntar el dinero para indemnizar y revocar la licencia”, dijo el alcalde del PP Manuel Aracil Llorens.

Desde hace años, la posición de partidos y vecinos es la de oponerse a estas instalaciones al estar cercanas a un hospital y un colegio. De hecho, el actual alcalde prometió en marzo ante notario que conseguiría evitar la apertura si llegaba a la alcaldía.

Tras varias sentencias favorables a la empresa ASV Funeser SL, las obras del crematorio, cercano al Hospital de Sant Joan, avanzan rápidamente. La condición de la empresa para sentarse a negociar es que el Ayuntamiento ponga de entrada dos millones de euros sobre la mesa, una cantidad fuera del alcance de los presupuestos municipales.

Según las cuentas de Aracil, si los más de 23.000 vecinos censados del pueblo aportaran 25 euros por persona, podrían sentarse a negociar con la empresa. Aracil explicó que, en un principio, ofrecieron a la empresa abonar 1.350.000 euros en un plazo razonable de uno a tres meses y para los 650.000 restantes establecer un calendario de pagos. La empresa fue tajante y dijo que no, cuenta el alcalde, “quería los dos millones de golpe y el presupuesto no lo permite”.

Por ello, Aracil reunió a sus vecinos el jueves por la noche y les explicó la situación. Él mismo pagará 25 euros por cada miembro de su familia, cien euros en total. “Tenemos que recurrir a estas cosas porque las cosas son como son y es un tema que nos preocupa”, señaló el alcalde.

Desde ayer por la mañana los ciudadanos de Sant Joan ya pueden ir abonando las cuantías en hasta tres cuentas de La Caixa, Banco Santander y BBVA, así como en la Tesorería consistorial. La aportación ciudadana, avisa Aracil, “no es a fondo perdido”. Pero tampoco garantiza que el crematorio no se abra.

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