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El gasto de la Xunta en profesores y sanitarios cae un 10% en tres años

Los recortes salariales se extienden también a los colegios concertados

La conselleira de Facenda, Elena Muñoz, junto a la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo
La conselleira de Facenda, Elena Muñoz, junto a la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo LAVANDEIRA (EFE)

En 2013, la Xunta destinará a pagar los sueldos de profesores y profesionales sanitarios 2.758 millones de euros, el 32% de sus Presupuestos totales de 8.479 millones. Serán 336 millones menos que en 2010, una reducción del 10,85% en tres años. Así se refleja en las cuentas de la Administración autonómica para el año próximo, de las que el Gobierno gallego destaca que son "las más sociales de la historia".

 La Xunta defiende el compromiso social de sus Presupuestos argumentando que el 77% del gasto total va destinado a sanidad, educación y servicios sociales. Pero el récord de las cifras relativas esconde que las absolutas siguen desplomándose un año más, en especial en materia laboral. En el área de educación la Xunta gastaba en salarios de profesores 1.430 millones en 2010, cifra que en 2013 caerá hasta los 1.244, 186 millones y un 13% menos. En el apartado sanitario los sueldos de los médicos, enfermeros y demás profesionales suponían 1.664 millones en 2010 y caerán hasta los 1.514 en 2013, 150 millones y un 9% menos. Si se tiene en cuenta solo el último año, el recorte en sueldos de profesores entre 2012 y 2013 será de 82 millones (un 6,2%) y en salarios de sanitarios de 90 millones (un 5,6%).

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Dos de las consellerías sociales son dproporcionalmente, las que menos rebajan su presupuesto total: un 1,5% la de Sanidade y un 1,6% la de Traballo e Benestar. Educación, que ahora integra Cultura, cae un 4,2%. Así que el grueso del recorte se concentra en las consellerías inversoras, entre la que destaca la de Medio Ambiente e Infraestruturas, que encauza las grandes obras y que manejará 441 millones, un 13% menos. La propia Xunta destaca que sus principales esfuerzos se centrarán en 2013 no en grandes obras sino en el mantenimiento de las carreteras ya existentes. De las nuevas actuaciones, muchas acometidas a través de la Sociedade Pública de Investimentos (SPI), apenas son destacables los 10 millones que irán a continuar las obras de la autovía Tui-A Guarda, los 7,8 millones para la Tercera Ronda de A Coruña, los 5,1 millones del Auditorio de Lugo o los 7,5 millones que se reparten los accesos a los puertos secos de Salvaterra y Monforte.

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En el resto de áreas la Consellería de Educación subraya su intención de acometer obras en 134 centros educativos y renovar mobiliario en otros 254. Economía quiere mejorar la formación laboral en sectores estratégicos como la automoción y el medio ambiente. Presidencia intentará darle el empujón definitivo a los juzgados de Ourense, y Sanidade continuará su plan de construir nuevos centros de salud y hospitales como el de Vigo gracias a la colaboración público-privada. Pero este mecanismo, al igual que la inversión directa, se ha agotado. Así lo reconoce la Xunta, que no incorpora nuevos compromisos de pago aplazado. Y es que los ya contraidos por las autovías actuales o futuras y por el nuevo hospital de Vigo ascienden a algo más de 3.000 millones para las dos próximas décadas, de los que en 2013 habrá que abonar ya 28,2 millones y 121 millones en 2014.

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Las cuentas públicas también recogen un recorte de la financiación a las universidades, que pasan de los 391 millones de este año a los 371 del próximo, un 5% menos que la Xunta intentó encubrir ayer destacando que la partida específica para I+D universitaria aumenta en dos millones. Igualmente, apuntó que en los tres últimos años ha aportado 75 millones más de lo previsto a la financiación local, pero la realidad es que en 2013 los municipios recibirán 124 millones, dos menos.

Por otra parte, la Xunta no incluirá en sus cuentas para el próximo año la polémica ley de acompañamiento a la que recurrían los gobiernos de Fraga, de la que prescindió el bipartito y que fue recuperada por Feijóo. Esa ley, que en años anteriores permitió al Gobierno gallego modificar muchas otras normas de una sola vez y con un trámite de urgencia menos garantista que el ordinario, no aparece ahora. Pero la Xunta sí incluye en el articulado de la ley presupuestaria varias disposiciones relevantes más allá de los números para el próximo año. Reforma el canon eólico, obliga a los entes públicos en pérdidas a elaborar un plan para recuperar el equilibrio presupuestario y prevé que a partir de ahora los contratos y convenios que se suscriban incluyan una cláusula que permita a la Xunta resolverlos unilateralmente si afectan a la estabilidad presupuestaria. Igualmente, anula una compensación salarial establecida en 2008 para los profesores de colegios concertados, reduce su aportación a esos centros en la línea del recorte de sueldos decretado para los empleados públicos y no les actualiza la inflación.

La presentación de estas cuentas el día de los Santos Inocentes llevó a la oposición a calificarlas de forma unánime como “broma” e “inocentada”. El PSdeG lamentó la “obsesión por cumplir a rajatabla el objetivo de déficit” y puso en duda que la Xunta tuviese en cuenta los datos económicos actualizados. AGE lamentó la “urgencia y precipitación” de la Xunta al tramitar las cuentas y el BNG las consideró “absolutamente antisociales” y criticó por “demagógica” la posibilidad de que los funcionarios puedan cobrar en enero parte de la extra de verano que se les recortará. Los sindicatos coincidieron con los nacionalistas en destacar que los trabajadores públicos ya tienen la posibilidad de pedir un adelanto de sueldo cuando quieran.

Una reducción de impuestos de 6 millones

Uno de los principales anuncios del presidente Feijóo tanto en su discurso de investidura como en la presentación el jueves de los Presupuestos para 2013 fue el de nuevas rebajas y exenciones impositivas. Habrá que pagar menos impuestos por invertir en nuevas empresas, por heredar si lo obtenido se destina a crear una sociedad o por comprar locales si su objetivo es igualmente montar un negocio. Según el Gobierno gallego, con estas medidas quiere no "retirar dinero de la economía". Pero ayer, y pese a sus reticencias iniciales, la conselleira de Facenda, Elena Muñoz, acabó reconociendo que el dinero que se dejará de "retirar de la economía" por esas nuevas rebajas impositivas son apenas unos 6 millones de euros. Ese menor ingreso en las arcas públicas se produce pese a que el Gobierno gallego se queja de la constante reducción de sus ingresos desde hace cuatro años y pese a las peticiones unánimes de la oposición para que grave más a los patrimonios más altos.

La conselleira Muñoz admitió el limitado alcance de las rebajas impositivas previstas en una comparecencia ante la prensa tras entregar oficialmente el proyecto de Presupuestos a la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo. Las cuentas inician así su tramitación parlamentaria con el objetivo de que entren en vigor el 1 de marzo.

En su intervención la titular de Facenda admitió también que la Xunta no tiene cuantificado el beneficio concreto que supondrá para la economía gallega el denominado Fondo de Crecimiento que contemplan las cuentas para 2013. Ese fondo, que contabiliza agrupadas partidas distribuidas entre varias consellerías, asciende a 386 millones, pero “no tendrá efecto de un día para otro”, dijo Muñoz, quien explicó que “lo que se hizo fue priorizar en cada consellería lo destinado a gasto productivo”.

Muñoz defendió que las cuentas destacan por su "solvencia" y "control del déficit" y reducen el endeudamiento anual con respecto a 2012. Sin embargo, la deuda pública, que actualmente es de 8.064 millones, ascenderá a finales de 2013 a 8.676 millones, un 7,5% más. El mayor atisbo de optimismo en la intervención de Muñoz fue su estimación de que “en el último trimestre del año podremos detectar tasas positivas" gracias al buen comportamiento de la exportaciones, tras reconocer que el paro, que ascenderá al 21%, “sigue siendo el principal problema”.

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