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Fotogramas de Sol

Un cineasta veterano y un joven activista. Ambos quedaron cautivos del poder del 15-M y quisieron inmortalizarlo. Sus dos documentales reviven la acampada

Imagen utilizada en el proyecto de Grueso.
Imagen utilizada en el proyecto de Grueso.JULIO ALBARRÁN

¿Qué significó la acampada de los indignados en la Puerta del Sol? ¿Quiénes eran esos chicos que desafiaron al sistema con una simple tienda de campaña y un gesto con las manos? ¿Qué queda de aquellas ganas de cambiar el mundo? Esta semana se han presentado en el museo Reina Sofía de Madrid dos documentales que relatan aquellos días bajo las lonas de Sol, la vida de una ciudad paralela en el centro de Madrid y los sueños de varias generaciones. El cineasta Basilio Martín Patino presentó el pasado miércoles su documental 15-M, Libre te quiero.

A sus 81 años, el reconocido documentalista no esperaba hacer más cine, pero la manifestación que se conoció como la #spanishrevolution le estalló a las puertas de casa. Fue tal la atracción que sintió hacia esos madrileños que protestaban alegremente en la céntrica plaza del Sol que rápidamente cogió su cámara y filmó lo que acontecía en las calles de aquella ciudad ilusoria. Con la letra de la canción de Amancio Prada—Libre, te quiero—, el sonido de la calle y los gritos de una multitud de protagonistas anónimos, Patino prescinde de la voz en off para mostrar el “estado de felicidad” que, según él, se vivió en la plaza.

En el documental 15-M: Excelente, revulsivo, importante, el cineasta Stéphane Grueso, de 39 años, ha querido contar su visión personal sobre el movimiento en el que participa activamente. El lunes pasado, Grueso presentó la película con la que pretende dar a conocer quiénes son y qué hacen los indignados. En los 74 minutos que dura la cinta, Grueso se adentra en las causas de la #spanishrevolution“, relata las primeras horas de la acampada, y enumera las aportaciones del 15-M a la sociedad. “Somos ciudadanos responsables que nos preocupamos por nuestros vecinos y por el bien común, y lo que hacemos es actuar”, asegura el cineasta sevillano.

Tanto el viejo Patino como el joven Grueso dedican varios minutos de sus respectivos documentales a las cargas policiales que se produjeron tras el desalojo de la Puerta del Sol, en la plaza de Cataluña y en diferentes manifestaciones del 15-M. A diferencia del célebre maestro, Stéphane Grueso fue uno de los chicos que durmió bajo las lonas, por lo que tuvo que recopilar una gran cantidad de material audiovisual para montar su película. Nada hubiera sido posible sin la colaboración de sus compañeros de proyecto, Patricia Horrillo, la coordinadora, y Pablo Soto, el productor. Bajo el nombre www.15m.cc, los tres amigos han creado también una página web con varios proyectos para difundir el movimiento.

La película de Patino se proyecta estos días en dos salas madrileñas (en el Pequeño Cine Estudio y en Yelmo Cines Ideal), mientras que el documental de Grueso aún no tiene fecha para su publicación en internet. “Estamos intentando que una televisión lo emita para subirlo después a la red con una licencia copyleft para que todo el mundo pueda copiarla, compartirla y modificarla libremente”, asegura el director en una entrevista por correo electrónico. Distribuida libremente o no, ambos cineastas han querido mostrar las “lecciones de vida” que, como dice Patino, les dieron los ciudadanos aquella primavera de 2011.

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