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libros

10 años juntando cosas

El festival de poesía Yuxtaposiciones celebra en La Casa Encendida su décima edición con un programa que combina letras, música y arte en todos los formatos. Esta noche empieza la fiesta

Sergio C. Fanjul
La micropoetisa Ajo, organizadora de Yuxtaposiciones.
La micropoetisa Ajo, organizadora de Yuxtaposiciones. SAMUEL SÁNCHEZ

Yuxtaponer: poner algo junto a otra cosa o inmediato a ella. Por ejemplo, la poesía. Ponerla junto a la música, junto al hip hop, junto al vídeo o los cachivaches electrónicos, junto a la interpretación. Eso es lo que lleva haciendo 10 años el festival Yuxtaposiciones, explorar los límites difusos donde la poesía se roza con otras disciplinas y se transforma, donde se desmelena, se contamina y escapa del papel y de los círculos cerrados. Poner la poesía junto a la poesía y junto a la gente. Esta noche el cumpleaños se celebra en el que ha sido escenario habitual del festival, el patio de La Casa Encendida (Ronda de Valencia, 2), a partir de las 20.30.

Este año la organizadora del festival, la micropoetisa Ajo, se ha rodeado de algunos compañeros de camino. Todos vienen de dentro de nuestras fronteras, “pero cada uno de un planeta diferente”, según explica. Abrirá la sesión el poeta Eduard Escoffet acompañado del trío electrónico Bradien, con el que acaba de sacar un disco titulado Pols, que, según explican, les acerca al circuito indie. “Es una electrónica suave y sencilla en la que se enmarcan los poemas, de temáticas tan variadas (y tan poco poéticas) como la política, el ultraecologismo o lo arquitectura”, explica el poeta que, además, lleva colaborando con la organización del festival desde el principio. Para el segundo plato le han dado carta blanca al célebre rapero Frank T, que ofrecerá algo a medio camino entre un concierto tradicional y un recital de poesía. Veremos.

Para terminar, la propia Ajo se subirá a la palestra para micropoetizar en compañía de Judith Farrés y otras “amistades delux”, como, por ejemplo, el músico Nacho Mastretta. El aperitivo lo puso ayer el ensayista Eloy Fernández Porta, con el espectáculo de spoken word con el que presenta su nuevo libro, Emociónese así (Anagrama), un ensayo que explora “la fabricación del sentimiento en el capitalismo”.

“Nunca pensé que esto iba a durar 10 años, y cada edición la he preparado como si fuera la última”, explica Ajo. “Cuando empezamos, un festival de poesía era algo insólito de lo que la gente iba a huir corriendo”. Comenzó llamándose Intervocálica y estaba integrado dentro de Experimentaclub, una muestra de la música electrónica más experimental y arriesgada que Ajo también codirigía en La Casa Encendida. La fuente de inspiración había sido otro espacio, llamado Poética, que, en otras coordenadas, se había celebrado en algunas ediciones del festival de música independiente Festimad. “Cuando se dejó de celebrar el Poética, pensaba que había que continuar con algo similar”, explica Ajo. Tras dos ediciones de Intervocálica, como un spin off, se independizó y se hizo grande, cambiando a su nombre actual. Por su escenario han pasado la más diversas propuestas provenientes de todas las partes del mundo. “Había veces que el camerino era como la Torre de Babel, había gente de todos lados y no sabías ni en qué idioma estabas hablando”, recuerda la organizadora.

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Sobre la firma

Sergio C. Fanjul
Sergio C. Fanjul (Oviedo, 1980) es licenciado en Astrofísica y Máster en Periodismo. Tiene varios libros publicados y premios como el Paco Rabal de Periodismo Cultural o el Pablo García Baena de Poesía. Es profesor de escritura, guionista de TV, radiofonista en Poesía o Barbarie y performer poético. Desde 2009 firma columnas y artículos en El País.

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