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La división interna del PP como trasfondo

Caixa Ontinyent, fundada en 1884, es la excepción que confirma la regla: una entidad saneada en medio del paisaje devastador del sistema financiero valenciano

Valencia -

Caixa Ontinyent, fundada en 1884, es la excepción que confirma la regla: una entidad saneada en medio del paisaje devastador del sistema financiero valenciano. Aunque su presidente, Rafael Soriano, estuvo a punto de rendirse a los cantos de sirena que lanzó en su momento José Luis Olivas desde la presidencia de Bancaja, no llegó a fusionarse en la operación para crear Bankia por las resistencias de los propios profesionales de la caja. Ahora, no contempla “ninguna posibilidad” de fusionarse y, como explicó Soriano tras la asamblea de junio, prevé continuar por el mismo camino de baja dependencia del crédito mayorista, aceptable liquidez y poca exposición al mercado inmobiliario. Caixa Ontinyent, con un volumen de negocio de 1.623 millones de euros, tuvo en 2011 unos beneficios de 970.000 euros.

Sin embargo, Soriano, que es suegro de Pedro García, el exdirector general de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV) imputado en el caso Gürtel, ha dado al consejo de la entidad un aire de clan familiar. Del consejo de Caixa Ontinyent forman parte un hijo suyo, elegido en la lista de la Generalitat, y un yerno, que entró en representación de los impositores. De ahí que los promotores de su relevo argumenten el perfil técnico y profesional de una lista alternativa que pretende la renovación y la profesionalización de los órganos de gobierno.

Con todo, hay un trasfondo político que implica directamente al PP. La candidatura de Javier Aparicio a la presidencia tiene el visto bueno del secretario regional de los populares valencianos, Serafín Castellano, y de su presidente y jefe del Consell, Alberto Fabra. De la continuidad de Soriano, en cambio, sería partidario el presidente provincial del PP y de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, con el que están enfrentados. Escaldados por los efectos nefastos que ha tenido el trasteo político de las cajas, tanto la Generalitat como la dirección del PP quieren evitar a toda costa que la maniobra aparezca como un episodio de sus problemas internos. Pero la reciente destitución de la exacaldesa de Ontinyent Lina Insa como portavoz del grupo municipal en la capital de la Vall d’Albaida a manos de los concejales afines a Rus no es ajena a la actitud de la dirección regional del PP ante una caja cuyo ámbito de influencia alcanza la comarca de La Costera, de cuya capital, Xàtiva, es alcalde Rus.

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