_
_
_
_
_

Un barco de inspección del Ministerio de Agricultura desata la polémica en Roses

El patrullero, tripulado por la Armada, pidió a un pesquero que izase la bandera española

Rebeca Carranco

Un patrullero del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente tripulado por la Armada, en labores de inspección pesquera, desató ayer la polémica en Roses (Girona). El buque Arnomendi volvía de Francia y al pasar por Roses vio un barco y recordó a las personas que faenaban en él que sin la bandera de pabellón, que indica la nacionalidad, no podían hacerlo, ha explicado hoy un portavoz de dicho ministerio. "Pero no se le mandó a puerto ni fue a más", ha añadido. 

El barco es uno de los tres que posee Agricultura en esas mismas condiciones (con tripulación de la Armada). Su única función son las inspecciones pesqueras y en él, además del personal de la Armada, viajan dos inspectores civiles del ministerio, según ha explicado el mencionado portavoz. El Arnomendi se encontraba en labores habituales de inspección por la costa española.

En las redes sociales, sin embargo, se ha vivido como una afrenta a Cataluña. "El patrullero se puso al lado del barco de pesca y, cuando arriaba la zódiac para materializar la inspección, el comandante del barco recordó que debía izar la bandera", ha explicado Antoni Abad, presidente de la Federación Catalana de Cofradías de Pescadores de Girona, que quita importancia al incidente. Según el alcalde de la ciudad, Carles Pàramoo (CiU), el mensaje que transmitió el comandante por el Canal 67 de la radio, que escuchan todos los pescadores, fue: “Y que icen la bandera nacional, la nuestra”.

El ministerio sostiene que el patrullero no se acercó a ningún otro barco, aunque según Abad, inspeccionaron al menos otra embarcación. "Es una inspección normal, de lo más corriente, que hacen una vez o dos al año", ha insistido Abad. La normativa obliga a los pesqueros a llevar la bandera española. "Nos lo recuerdan cada dos por tres", ha añadido Abad, restando importancia al hecho de izar la roja y gualda. El problema es la "sensibilidad" que hay en este momento, ha indicado Abad. Al alcalde de la ciudad le parece una "anécdota" e incluso le ve una parte positiva: "que se refieran a 'nuestra bandera' significa que entienden que hay dos", bromea. 

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Rebeca Carranco
Reportera especializada en temas de seguridad y sucesos. Ha trabajado en las redacciones de Madrid, Málaga y Girona, y actualmente desempeña su trabajo en Barcelona. Como colaboradora, ha contado con secciones en la SER, TV3 y en Catalunya Ràdio. Ha sido premiada por la Asociación de Dones Periodistes por su tratamiento de la violencia machista.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_