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Los bancos reclaman las ayudas a la vivienda que anticiparon y no cobran

El Consell habilita 5,5 millones para lo “urgente” de una deuda de 250 millones

Los bancos están reclamando a los afectados el importe y los intereses de las ayudas de acceso a la vivienda concedidas por la Generalitat y que esta no ha pagado. Para hacer frente a esas obligaciones de lo que se conoce como cheque-vivienda, el Consell adoptó un acuerdo el pasado 5 de octubre, publicado este lunes en el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana, que modifica el programa de Arquitectura y Vivienda para trasladar 5,5 millones de euros a una nueva línea nominativa destinada a “pagos de los anticipos de las ayudas correspondientes a actuaciones protegidas en materia de vivienda”.

El acuerdo incluye una relación de cerca de 1.500 nombres de beneficiarios de subvenciones para alquiler, rehabilitación o adquisición de viviendas protegidas a los que se transferirán las cantidades pendientes. Son en su mayoría personas individuales, aunque figura también alguna empresa y la mayor de todas las cifras, 57.962 euros, corresponde a la Asociación Comparsa Abencerrajes de Ontinyent.

La deuda de la Generalitat por las ayudas, que en muchos casos adelantaron las entidades bancarias con las que la Administración autonómica suscribió convenios para “instrumentar el anticipo”, alcanza los 250 millones de euros. La Consejería de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente reconoció que los 5,5 millones van destinados a subvenciones “que no se han pagado y los bancos están cobrando”. El departamento que dirige Isabel Bonig asumió que “es una situación urgente” y situó el origen del grueso de los casos en el año 2010, aunque algunos vienen de uno o dos años antes.

Precisamente este miércoles tiene previsto la diputada socialista María José Salvador preguntar en el pleno de las Cortes Valencianas a la consejera Bonig sobre este asunto. La parlamentaria cifra en más de 30.000 las personas afectadas, “que vieron reconocida su ayuda y no se ha pagado”.

“El acuerdo del Consell está bien, pero es un parche”, comentó Salvador. “La deuda se arrastra desde 2007. Son ayudas reconocidas, llevan cinco años sin pagar y han seguido reconociendo ayudas. No se pueden truncar las expectativas de la gente de esta manera”. La diputada socialista apuntó que las cuantías medias oscilan entre 3.000 y 15.000 euros. “Es mucho dinero, y la gente en muchos casos condiciona la compra, la rehabilitación o el alquiler al hecho de que se le reconoció esta ayuda”.

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