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Miles de universitarios protestan en Barcelona por el aumento de las tasas

La huelga de estudiantes se notó más en las aulas que en las calles

El ingente incremento del 67% que han sufrido los precios de las matrículas universitarias podría haber hecho esperar una movilización mayor. Pero ayer la respuesta de los estudiantes fue discreta, al menos en la calle. Unos 3.000 estudiantes, según la Guardia Urbana y los Mossos (en la última huelga de mayo fueron cerca del triple), se manifestaron en Barcelona en contra de los recortes. En las aulas, el paro tuvo mayor acogida, especialmente en los campus grandes: la Universidad de Barcelona (UB) y la Autónoma (UAB). En la Politécnica, el paro fue desigual. En el resto reinó la normalidad.

Sergi Pla cursa tercero de Educación Social en el campus Mundet de la UB y protesta por el aumento de los precios de las matrículas y por las precarias condiciones en las que estudian debido a los recortes. Hay asignaturas todavía sin profesor asignado, explica, y muchas clases están masificadas. “Si a eso le sumas la fuerte subida de la matricula, es como para indignarse”, se queja. Un compañero suyo ha tenido que dejar los estudios por este hecho. “No podía pagar tanto. Es una pena”.

Unos 3.000 estudiantes desafiaron la lluvia que al mediodía hizo acto de presencia en el centro de Barcelona y, tras una pancarta que rezaba: “Ante la dictadura del miedo, protejamos la educación”, la marcha transcurrió sin apenas incidentes. Se lanzó pintura contra los edificios de la Bolsa de Barcelona y de la Comisión Europea, y se quemó un cajero de una entidad bancaria. La UB también denunció algunos actos violentos en sus facultades.

La manifestación finalizó dos horas después ante la sede de Convergència i Unió, donde se quemaron papeletas del partido, se lanzó pintura contra el edificio y se quemó un monigote con la cara del presidente Artur Mas. Representantes de la Plataforma Unitaria en Defensa de la Universidad Pública (PUDUP), entidad convocante de la manifestación, leyeron un manifiesto en el que se afirma que los recortes están poniendo “en peligro la educación pública, degradando su calidad, y avanzando forzosamente hacia su privatización”. La plataforma también alerta de que el fuerte aumento de las matrículas, a la vez que se reducen las becas, lleva hacia la “elitización” de la universidad.

La jornada estuvo marcada por la fuerte presencia policial. Especialmente visible fue en la UAB, donde decenas de agentes antidisturbios de los Mosssos d’Esquadra evitaron que los piquetes cortaran la AP-7, bloquearan los accesos por carretera al campus e interrumpieran el servicio de Ferrocarrils. Los Mossos también se personaron en el campus Mundet y en la Zona Universitaria, y acompañaron a las columnas de manifestantes que partieron por la mañana desde ambos puntos para converger en la plaza de la Universitat. Durante las marchas, los alumnos de Mundet cortaron la Ronda de Dalt de Barcelona y los de la zona alta ocuparon la Diagonal, provocando grandes problemas de tráfico.

Girona, Lleida y Tarragona también registraron protestas, pero con participación reducida.

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Con información de Gorka Ellakuría y Anthony Coyle.

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