El adiós con una sonrisa en la boca
La exconsejera Plañiol se despide de su equipo y afirma que se encuentra “triste”
“Me voy triste porque en este puesto estaba muy contenta y creo que lo estaba haciendo bien”. Con esta frase y con una sonrisa en la boca la exconsejera madrileña Regina Plañiol se ha despedido de su equipo en la Consejería de Presidencia y Justicia, en la que ha estado al frente 16 meses. Su destino ahora será como diputada en la Asamblea Regional, donde piensa seguir trabajando “a pleno rendimiento” para los madrileños.
Plañiol ha ido uno por uno dando las gracias a todos sus colaboradores, alguno de los cuales no ha podido ocultar sus lágrimas ante el cese inesperado de la que se apuntaba como posible vicepresidenta de la Comunidad de Madrid. Los cambios en el equipo de gobierno la han dejado fuera del gabinete de Ignacio González.
Mientras ella se despedía de sus trabajadores, sus ayudantes bajaban dos cajas de cartón al vehículo oficial. Con un portafolios y un ordenador portátil en la mano y un paraguas y una gran sonrisa, ha salido de la Consejería y ha saludado también a los guardias civiles y a sus escoltas. Tras saludar al alcalde de Coslada, Raúl López, que pasaba en esos momentos por la calle, se ha montado en el vehículo oficial dejando atrás la sede de la Plaza de Pontejos.