_
_
_
_
_

“Anoche llovía fuego”

Una vecina de Bugarra llega a su casa para descubrir que está cubierta por una manta de ceniza

Tres aviones combaten el fuego en el término de Pedralba.
Tres aviones combaten el fuego en el término de Pedralba.CARLES FRANCESC

Teresa Yuste, vecina de Bugarra, ha logrado llegar a su casa poco después del mediodía para descubrir que estaba "cubierta por una manta de cenizas". "Hay mucha ceniza, en las calles es comos si fuera un confeti negro, y dentro de la casa también". Teresa explica que "un puñado de vecinos han pasado la noche en la localidad porque no llegaron al segundo autobús, que salió en torno a la una de madrugada".

Los vecinos de Bugarra fueron evacuados en dos autobuses. Teresa y su padre han conducido esta mañana desde Chulilla hasta Bugarra para comprobar los daños que han sufrido los campos que poseen en los términos municipales de ambas localidades. "Se han quemado varios olivos y algarrobos", comenta Teresa. Los campos están labrados y limpios de maleza, pero la fuerza del viento, que llegó a alcanzar los 70 kilómetros por hora en algún momento de la noche, provocó auténticas "lenguas de fuego que lo han arrasado todo". "Parecía un lanzallamas", repite el padre de Teresa al volante. "Hay un algarrobo atravesado en la carretera". "Esta todo negro", lamenta Teresa. "El incendio empezó a media tarde del domingo. Al principio la gente no quería ni irse del pueblo, pero en apenas una hora las llamas habían avanzado muchísimo", comenta. "Tengo frente a mí un frente activo de unos tres kilómetros entre Chulilla y Bugarra", relata Teresa.

Una vez en el pueblo, Teresa explica que "dos granjas que están al lado del río se han quemado, y la carpintería ha acumulado tanto calor que parece que el techo haya estallado". "La zona de baño, junto al río, está arrasada. El fuego se ha llevado todo. El monte al otro lado del río está todo negro. Anoche llovía fuego".

Entre Chulilla y Bugarra, Teresa asegura haber visto hasta cinco helicópteros. "El fuego en la zona de Chulilla no está controlado y hay otro frente que avanza hacia Pedralba". Las dos salidas de Bugarra, hacia Chulilla y hacia Pedralba, están, pues, cortadas. "Hemos comido en casa y no sabemos cuando vamos a poder salir".

 

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_