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Unos padres de Jaén logran que se reabra la investigación de la muerte de su hijo

Un informe forense apunta que el joven falleció atropellado y no por una caída

Ginés Donaire

Este viernes se cumplirán cuatro años desde que Maribel Castilla habló por última vez con su hijo Javier, que había cumplido 27 años unos días antes. El joven de Jaén había acudido a la boda de un amigo en La Calahorra (Granada) y, durante la madrugada, cuando estaba hablando por el móvil con su madre, la conversación se cortó de modo fulminante apenas cuatro segundos después de iniciado el diálogo. La tarde siguiente, dos vecinos encontraron el cadáver de Javier en el fondo de un barranco de unos cinco metros de altura. La Guardia Civil dictaminó entonces que la muerte del joven jiennense se debió a una caída accidental, una tesis que los padres nunca creyeron y que ahora, cuatro años después, han logrado desbaratar.

Maximiliano Joyanes y Maribel Castilla empiezan a ver luz al final del largo túnel en el que se sumergieron aquel 7 de septiembre de 2008. El informe pericial que la familia de Javier encargó al prestigioso forense sevillano Luis Frontela ha determinado que el joven fue atropellado por un coche cuando volvía a su hotel desde un salón de bodas, poco antes de las 5 de la madrugada.

El informe de Frontela expone que el vehículo le golpeó por las piernas, lo lanzó a la calzada y le pasó por encima. “El cuerpo quedó en el suelo en posición de cúbito lateral izquierdo y el vehículo que causó el atropello pasó por encima”. Además, el perito asegura que “al menos dos personas” se encargaron de transportarlo hasta el terraplén en un coche casi con total seguridad. Y dejaron marcas en muñecas y tobillos al hacerlo. Incluso se afirma que eran personas “conocedoras del terreno” las que arrojaron a la víctima al barranco, informa Europa Press.

Así las cosas, el informe de Luis Frontela da un vuelco por completo a la investigación del caso, y se une a otro informe del médico Aurelio Hernández, que también concluyó que la muerte se produjo por un mecanismo distinto a la caída. De momento, el letrado de la familia, Manuel Gutiérrez, ya ha hecho entrega del mismo en el Juzgado de Instrucción 2 de Guadix (Granada), el que instruye el caso. El Juzgado ya ha dado traslado del mismo a la fiscalía, al objeto de propiciar la reapertura de nuevas líneas de investigación en este caso. La Guardia Civil determinó en su día que la muerte fue por la caída partiendo de los informes de los forenses del Instituto de Medicina Legal de Granada, lo que produjo el archivo del caso.

El abogado de la familia ha anunciado este miércoles que van a pedir que sea el Cuerpo Nacional de Policía el encargado de continuar investigando el caso ante las “lagunas” observadas en la investigación de la Guardia Civil.

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