Un expresidente balear del PP presenta en Palma un acto catalanista de Pujol
El líder de Convergència expresó su "preocupación" por la política lingüística del PP de Baleares
“La presión de la lengua y la cultura castellana desde los medios de comunicación, la inmigración, la política y la demografía es muy fuerte”, aseguró ayer fundador de Convergència y expresidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol en Palma de Mallorca. Pujol protagonizó ayer en un acto cultural de contenido político en Palma con motivo de la presentación de su libro Memòries. De la bonança a un repte nou (1993-2011). El acto, de nítido cariz nacionalista y catalanista y de censura indirecta al PP local, fue presentado por el expresidente balear Cristòfol Soler (PP). La Obra Cultura Balear, entidad enfrentada al Gobierno balear del PP, convocó el acto.
Soler fue derrocado en 1996 por su propio grupo parlamentario por su política de apertura lingüística y favorable al catalán. Soler, estuvo apenas un año en el cargo, período en el que colaboró con la Generalitat. En la actualidad sigue militando en el PP y disiente de la estrategia del actual presidente balear, José Ramón Bauzá, a quien tilda de “españolista”.
En el acto, Pujol expresó su “preocupación” por la nueva política lingüística que el PP implanta en Baleares, expresada en la retirada de la exigencia del conocimiento del catalán para entrar en la Administración, la doble vía en la enseñanza y la progresiva castellanización de la Administración y los medios públicos de comunicación.
