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La trama de las ITV se lucró con el traspaso de la planta de Sony a Ficosa

“Para encontrarlo hay que ser un lince”, dice un implicado sobre el rastro del dinero

Jesús García Bueno
Planta de Ficosa en Viladecavalls.
Planta de Ficosa en Viladecavalls.SUSANNA SÀEZ

La compra por Ficosa de la planta de Sony en Viladecavalls (Vallès Occidental), considerada un caso “modélico” de reconversión industrial, también tiene su lado oscuro. Los implicados en el caso de las ITV se lucraron con la operación, presuntamente, a través de un entramado de empresas y facturas falsas. Ficosa, la multinacional de componentes para el automóvil, pagó tres millones de euros por asesoramiento al empresario Sergi Alsina, al que los investigadores consideran el director de la trama corrupta y el encargado de aportar los contactos políticos; básicamente, el de su amigo y secretario general de Convergència Democràtica de Catalunya, Oriol Pujol. Un informe de la Agencia Tributaria considera que los investigados “cruzaron facturas” para hacer llegar parte de ese dinero (un millón) “al destinatario último”: Pedro Navarrete Sanz. Navarrete era entonces responsable de Sony en España, cargo que abandonó el pasado abril, un mes después de las detenciones.

La operación se cerró en 2010 y permitió, inicialmente, salvar los cerca de 1.000 puestos de trabajo que estaban en peligro por la marcha de la firma japonesa. Ficosa se instaló en la planta para convertirla en un centro de innovación en el campo de la electrónica. Pero la adquisición sirvió también para que diversas personas se llevaran un buen pellizco a título personal. A raíz de la operación “se deriva un entramado de facturas y documentos que, supuestamente, habrían sido falsificados a conveniencia de los interesados”, señala el informe. En el negocio participaron, supuestamente, dos de los detenidos en la derivada catalana del caso Campeón —Alsina y el empresario Sergi Pastor—, además del matrimonio formado por Navarrete y María Jesús Muro.

Los implicados “intentaron interponer el máximo de sociedades para no dejar rastro”, señala Hacienda, como se desprende de una conversación telefónica de Navarrete que aparece en el sumario judicial: “Está perdida la trazabilidad porque [el dinero] primero viene a Alsina, de Alsina va a Pastor y de este a Landiron. Para encontrar esa línea hay que ser un lince”. Landiron es la empresa familiar de Navarrete y su mujer. De los tres millones que inicialmente recibe Alsina por “asesoramiento”, el 4 de enero de 2011, dos tercios van a Alta Partners y el resto, a Bersenat, la empresa donde figura como administradora su esposa. De ahí, el dinero se mueve hacia la firma de Pastor (Molkolan) y, finalmente, llega a Landiron.

Todas esas empresas figuran en el organigrama de la Agencia Tributaria sobre la trama de las ITV. Con la aportación de los socios y de Ficosa se creó Upprime Energy, la firma que según los investigadores iba a beneficiarse de negocios obtenidos de forma irregular. La red corrupta, en la que también están implicados el empresario Ricard Puignou, el subdirector de Seguridad Industrial, Isidre Masalles, y el cargo de Convergència Josep Tous, pretendía amañar concursos de estaciones de ITV y montar un negocio sobre eficiencia energética gracias a sus contactos políticos.

La investigación considera que Oriol Pujol tenía “participación accionarial indirecta” en la trama y, por tanto, iba a beneficiarse de esos negocios. Su mujer, Anna Vidal, emite facturas por “informes” de forma regular a Alsina —una de ellas, por 200.000 euros— que Hacienda considera fraudulentas porque no se corresponden a ningún trabajo realizado.

Los pinchazos ilustran las irregularidades. Alsina llama a su secretaria y le dice que le haga una factura por “servicios de asesoramiento en la operación de Sony” por un millón. Minutos más tarde, vuelve a llamarla y le dice que sean “dos millones más IVA”. Los implicados se interesan por la evolución de los pagos, aunque Alsina matiza que Navarrete “guarda un elegante silencio”. El amigo de Pujol admite que “no hay documentación” suficiente para justificar los trabajos. Por eso intentan preparar unos contratos, aunque “hay que hacerlo para que sea totalmente opaco”, señala Pastor.

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En un correo intervenido, el consejero delegado de Ficosa, Xavier Pujol, afirma que a la empresa le “vendría bien” que le fuera adjudicada una estación de ITV en Viladecavalls, a poder ser junto a la planta, para enviar allí a parte de la plantilla proveniente de Sony.

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Sobre la firma

Jesús García Bueno
Periodista especializado en información judicial. Ha desarrollado su carrera en la redacción de Barcelona, donde ha cubierto escándalos de corrupción y el procés. Licenciado por la UAB, ha sido profesor universitario. Ha colaborado en el programa 'Salvados' y como investigador en el documental '800 metros' de Netflix, sobre los atentados del 17-A.

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