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El Gobierno analiza hoy los posibles recursos contra las medidas de ajuste

El Ejecutivo retrasará “varias semanas” las directrices del próximo presupuesto

El Ejecutivo vasco centrará hoy su labor en el debate sobre la presentación de posibles recursos de inconstitucionalidad ante los recortes anunciados por el presidente Rajoy. El estudio pormenorizado de los informes preliminares encargados para analizar la posible invasión de competencias vascas guiará el consejo de gobierno que se celebra hoy en Vitoria, el último antes del parón estival de agosto. Los documentos apuntan hacia un posible abuso del decreto ley por parte del Ejecutivo central, así como hacia una vulneración de los acuerdos laborales.

Hoy no se abordará, por el contrario, la aprobación de las directrices para la elaboración del proyecto de presupuestos de 2013. Una cuestión, que sin embargo, no guarda una relación directa con la renuncia del Gobierno vasco a presentar las cuentas del próximo ejercicio, lo que incidiría en la posibilidad de un adelanto de las elecciones autonómicas que, por ahora, se descarta desde el Gabinete de Patxi López. El retraso, según apuntaron ayer fuentes del Ejecutivo autónomo a Vasco Press, se debe a la “extraordinaria situación económica, que impide fijar criterios fiables para elaborar las cuentas”.

Urkullu acusa a López de no haber buscado el acuerdo entre instituciones

La festividad de San Ignacio de Loyola el próximo martes convierte el consejo de hoy en el último del presente ejercicio. El próximo será ya a finales de agosto, por lo que la aprobación de las directrices del proyecto presupuestario se demorará “varias semanas”. Aunque los plazos varían en función de los años, el Gobierno vasco acostumbraba hasta ahora a darles el visto bueno en junio o julio. Esta vez, sin embargo, aguardará a despejar varias incógnitas en materia de ingresos y gastos. “No queremos aprobar unas directrices que sean desmentidas e invalidadas a los dos días, como sucedió con los Presupuestos del Estado de 2012”, aseguran desde el Ejecutivo de López.

La economía sigue en el ojo del huracán político. También el presidente del PNV y candidato a lehendakari, Iñigo Urkullu, centró ayer en ella su discurso, aunque más como una crítica a la gestión del Ejecutivo autónomo del PSE. El líder nacionalista acusó a López de haber sido incapaz de articular una salida propia a la crisis mediante la articulación de una “acción interinstitucional concertada”. “Siendo comprensible la protesta del Gobierno vasco ante los recortes del PP, no vemos al mismo tiempo ninguna actuación responsable por parte del mismo Gobierno vasco, ni siquiera en un esfuerzo para agilizar la convocatoria de la Comisión Mixta del Concierto Económico”, reprochó, a través de un artículo en su blog.

EH Bildu reclama al ‘lehendakari’ y a Barcina una respuesta unitaria
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Urkullu lamentó también que el Gabinete de López no haya dado una respuesta favorable a las propuestas que en materia económica planteó el pasado viernes, de manera extraordinaria, el PNV. “Solo seguimos viendo una actitud de dejarse llevar por la situación y refugiarse en el discurso anacrónico de izquierdas y derechas”, censuró.

EH Bildu, por su parte, situó al PP como el “destructor, uno a uno, de todos los derechos sociales conseguidos” y realizó un llamamiento al Gobierno de López, al de Navarra, que lidera Yolanda Barcina, y a las tres Diputaciones vascas para alcanzar acuerdos contra los recortes. La coalición soberanista, al frente de la institución foral guipuzcoana, abogó por avanzar en Euskadi hacia una nueva política fiscal y una política presupuestaria diferente.

Durante una rueda de prensa en San Sebastián, representantes de la formación abertzale defendieron una respuesta vasca conjunta frente a la “espiral loca” en la que ven sumido al PP. Los miembros de la coalición acusaron a los populares de querer “desmantelar y privatizar el sector público” con medidas que, según vaticinaron, “no tendrán consecuencias positivas en la economía y, menos aún, en el ámbito social”. Advirtieron, además, de que forman parte de un proceso de “recentralización salvaje”. Frente a ello, insistieron en la necesidad de un nuevo marco jurídico y político soberano. “Necesitamos soberanía para construir una sociedad nueva”, proclamaron.

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