La ‘síndica’ de Barcelona denuncia que la ordenanza “oculta” la prostitución
Según Maria Asumpció Vilà, la prohibición que quieren CiU y PP desprotege a las trabajadoras sexuales
La ordenanza con la que CiU y PP quieren prohibir la prostitución en las calles de Barcelona solo consigue ocultar el fenómeno y deja desprotegidas a las trabajadoras sexuales. Esta es la conclusión de un informe elaborado por la síndica de greuges de Barcelona, Maria Asumpció Vilà, a propósito del proyecto de normativa, que se aprobará en el próximo pleno.
Vilà pide "incrementar la lucha contra cualquier forma de explotación sexual", pero asegura que es necesario hacer una distinción entre prostitución voluntaria y forzada. El alcalde Xavier Trias considera que la prostitución es "la esclavitud del siglo XXI". "No se está regulando de una manera eficaz la prostitución en la calle y con el endurecimiento de la ordenanza se busca, sobre todo, hacer invisible el fenómeno, sin analizar a fondo un problema muy complejo en el que abundan los dramas humanos, tiene un marcado carácter punitivo y puede comportar una mayor desprotección social para las prostitutas", argumenta la síndica.
Aunque Vilà acepta que la prostitución callejera es un problema, considera que la modificación de la ordenanza, que reforma la aprobada por el pasado gobierno de izquierdas, es "precipitada" porque "no se ha hecho un debate cívico, profundo, y no ha tenido en cuenta un informe de la Dirección de Prevención, Seguridad y Movilidad de 17 de octubre de 2011, que desaconsejaba la modificación por entender que hará más difícil la atención social a las mujeres".
Finalmente, la síndica solicita que los programas de atención a las mujeres que desean abandonar el trabajo sexual se refuercen y que las labores policiales se concentren en combatir las mafias de trata y explotación sexual.