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Sin dinero contra el paro

Los recortes paralizarán importantes proyectos de la Agencia para el Empleo El programa Obras y servicios que en 2011 empleó a 1.400 personas no tiene financiación para 2012

El recorte de la subvención autonómica, que pasa de 14,8 a 2 millones de euros, suspenderá programas esenciales que la Agencia para el Empleo del Ayuntamiento de Madrid tenía proyectados hasta diciembre. Entre los afectados se encuentra el programa de Obras y servicios, que el año pasado empleó a 1.400 personas en labores de limpieza, mantenimiento de jardines y otros servicios públicos que reforzaron el personal del Consistorio. Las reducciones de las partidas en políticas activas de empleo aprobadas por Gobiernos populares a escala central (50%), autonómica (82%), y municipal (4,9%), han rebajado el presupuesto de la Agencia para el Empleo en un 34%. El presupuesto pasa de 43,7 a 29 millones de euros, lo que impedirá que la agencia cumpla con proyectos básicos para la formación y la promoción del empleo en la ciudad.

La agencia es un organismo autónomo que, según su gerente, Javier Serrano, “ya funciona como una agencia de colocación privada”, pero que se financia con dinero público. Serrano confirma que los recortes “afectarán a los programas del segundo semestre del año”. La falta de financiación alerta a la oposición. “Con este recorte Esperanza Aguirre renuncia a combatir el paro”, denuncia Ángel Lara, concejal de IU. Gabriel Calles, edil socialista, explica que la agencia tiene tres labores básicas; formación, intermediación y colocación y que el nuevo presupuesto imposibilitará la formación de los desempleados para insertarles en el mercado laboral.

Con una actividad tan reducida, las personas encargadas de gestionar los proyectos suprimidos temen por su futuro profesional debido a que la gran mayoría de los 300 trabajadores del organismo son interinos. Las alternativas ante este futuro incierto pasan por “buscar convenios con otras empresas municipales y transferir fondos de un departamento a otro”, como propone Calles, que cree que en época de crisis es imprescindible “tomar medidas de reinserción en el mercado laboral”.

Trabajadores del sector en el Ayuntamiento de Madrid confirman que agencias como Bymanpower, Forsel Consulting o Right Management, en teoría, ya pueden realizar las labores de asesoramiento y orientación, aunque no han sido dotadas de financiación para hacerlo. Profesionales y oposición coinciden en que estas políticas rompen la igualdad de los ciudadanos en el acceso a la orientación laboral. “Se está produciendo un trasvase a la iniciativa privada para cubrir el agujero que la crisis ha creado en las ETT”, dice Calles.

Los orientadores laborales sospechan que las agencias privadas seleccionarán a desempleados que no tengan dificultades para ser colocados e ignorarán a parados de larga duración con menos posibilidades. De este modo el Gobierno autónomo podrá mostrar a la ciudadanía mejores estadísticas de inserción laboral con un menor coste para las arcas públicas. El coste social, como la utilidad de la orientación laboral pública, será mucho más difícil de calcular.

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