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“Que los intervengan ya. Estamos desesperados”

Los farmacéuticos valencianos anuncian una huelga indefinida por la deuda del Consell

La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Valencia, María Teresa Guardiola.
La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Valencia, María Teresa Guardiola.MÒNICA TORRES

Los farmacéuticos de la Comunidad Valenciana empezarán una huelga indefinida el próximo lunes, día 9 de julio si la Generalitat no les paga al menos dos de las cuatro mensualidades que les debe. La deuda suma 480 millones de euros. “Que los intervengan ya. Estamos desesperados”, dice Jaime Carbonell, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Alicante, criticando a la Generalitat. María Teresa Guardiola, presidenta de los farmacéuticos de Valencia, anunció ayer que en las farmacias “queda lo que queda en los stocks”. El colegio calcula que más de 70 farmacias de toda la Comunidad Valenciana se encuentran ya en concurso de acreedores.

Guardiola, también presidenta del consejo que engloba a los farmacéuticos de Alicante, Castellón y Valencia, recibió una llamada del Ministerio de Sanidad mientras comparecía en conferencia de prensa: la convocaban en Madrid para una reunión horas más tarde con la ministra Ana Mato. Los farmacéuticos habían solicitado ayuda a Mato, al presidente del Gobierno y a la vicepresidenta, pero hasta el momento no habían recibido soluciones. A última hora de la tarde de este miércoles fuentes del Colegio de Farmacéuticos de Valencia se mostraban optimistas con las conclusiones de la reunión y anunciaron que a lo largo del jueves las harían públicas.

“Con la ministra hablé la semana pasada en unas jornadas y me dijo que iban a crear un plan especial para Valencia. Pero la verdad es que no nos llega y hay un momento en que no puedes esperar ya palabras, necesitas hechos”, explicaba Guardiola minutos antes de recibir la llamada.

Los farmacéuticos se reunieron con la ministra de Sanidad

Los farmacéuticos dicen haber agotado ya las pólizas que tenían contraídas para hacer frente a los gastos y ahora exigen un plan de pagos, porque los bancos los consideran como un aval para darles crédito. “Si ahora nos pagaran dos meses y después hubiera un calendario de pagos como estamos pidiendo, a nosotros nos da al menos una planificación y con ella podemos ir a la banca a pedir financiación”, explica Guardiola.

La deuda farmacéutica no está contemplada en el plan de pago a proveedores promovido por el Gobierno central, por incluir este solo las deudas contraídas hasta 2011. La deuda con las farmacias corresponde a 2012, por lo que estas piden una ampliación de los créditos para poder ser incluidas en dicho plan. El Ministerio de Hacienda ha asegurado al Colegio de Farmacéuticos de Valencia que se está intentando esa ampliación como solución a su situación.

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El consejero de Sanidad, Luis Rosado, aseguró ayer que la huelga “no influye en que el pago se realice antes o después” y añadió la deuda se saldará “en el momento en el que la Administración sanitaria tenga liquidez”.

La sanidad está “en estado de shock”

El cartel de la sede socialista en Valencia deja clara la posición del PSPV-PSOE ante las últimas medidas sanitarias del Gobierno: “100 dies així no, Rajoy. Defenem la sanitat pública”. Ximo Puig, secretario general del PSPV, anunció este miércoles en rueda de prensa que van a “exigir” la reunión de la Diputación Permanente para que analice el “estado de shock” de la sanidad valenciana.

El objetivo de esta convocatoria será presentar una proposición no de ley con una petición doble. Por un lado los socialistas valencianos exigirán la retirada de los decretos relativos a la privatización sanitaria de la Comunidad Valenciana. Por otro lado, instarán a la Generalitat a que plantee un recurso de inconstitucionalidad a las medidas del Gobierno central relativas al copago y al medicamentazo.

El secretario general de los socialistas valencianos acusa a una “tríada terrible” de la degradación de la sanidad: el medicamentazo, la privatización y el copago (al que califica de “repago”). Afirma también que el copago sanitario “convierte a los pensionistas en financiadores de la Generalitat Valenciana” porque mediante esta medida van a pagar la deuda que la Administración ha contraído con las farmacias.

Los farmacéuticos coinciden en que las quejas de los usuarios han sido mínimas. Esto se debe a la situación de “resignación” de la sociedad, según los socialistas, que acusan a la Generalitat de intentar convencer a la opinión pública de que la única solución posible es la privatización y el copago.

Puig compareció acompañado de los portavoces socialistas de sanidad en el Congreso y en las Cortes Valencianas y aseguró que el sistema de salud público y universal para los valencianos es sostenible: “En 1986 los españoles teníamos alrededor de 4.000 euros de renta per cápita y hoy tenemos más de 20.000; no es posible que la sanidad no sea financiable”.

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