_
_
_
_
_

Barberá recrimina a una conductora de la EMT su sueldo ante los pasajeros

La alcaldesa de Valencia salió de su coche oficial frente a su casa y se encaró con la trabajadora, que negó que cobrara "3.000 euros"

Cristina Vázquez
Rita Barberá, en una conferencia de prensa en mayo.
Rita Barberá, en una conferencia de prensa en mayo. JORDI VICENT

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, recriminó el pasado fin de semana a una conductora de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de la línea 31 el sueldo que cobra delante de los pasajeros del autobús, han denunciado dirigentes sindicales del comité de empresa.

Los hechos sucedieron el sábado, cuando Rita Barberá se bajó de su coche oficial molesta porque enfrente de su casa había un autobús de la línea 31, parado, con pegatinas donde se podía leer Rita no paga, en alusión a los retrasos que la plantilla de la empresa municipal de transportes dice acumular desde enero.

Según esta versión, la alcaldesa, con unos emolumentos anuales de más de 93.000 euros, salió del coche oficial y fue hacia donde estaba el autobús. “Se dirigió a la conductora para decirle que estaba cobrando tres mil y pico euros, delante de los pasajeros”, indicaron fuentes del comité de empresa.

La conductora le respondió que ella “no los cobra y que ningún conductor gana ese dinero”. Barberá también le recriminó que llevara las pegatinas, “de mala forma”, algo que el comité de empresa considera que “no se corresponde con una persona de su talante”. El incidente se produjo durante la jornada de huelga convocada por el comité de la empresa pública en protesta por los recortes y despidos que plantea la dirección.

 A la alcaldesa, sostienen fuentes del comité de empresa, “le está molestando mucho” que los trabajadores de la EMT se hayan manifestado en las últimas semanas para reclamar lo que les “debe” la empresa.

Los trabajadores exhiben unas pegatinas y camisetas con el lema Rita no paga a sus trabajadores “y posiblemente le moleste más eso que la huelga o la situación que se está planteando”. Desde el comité de empresa de la EMT han reiterado que “ningún trabajador cobra 3.000 euros, a excepción de los jefes y directivos” y recalcaron que han retado “en varias ocasiones” al concejal encargado de esta área a que lo demuestre.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

“Decisión política”

La plantilla tiene un sueldo neto de entre 1.400 y 1.700 euros y “en los que se trabajan festivos, sábados y nocturnidad”, recalcaron. Los representantes de los trabajadores creen que “se ha tomado la decisión política de destruir el estatus y el bienestar de un montón de familias”.

La alcaldesa de Valencia percibe algo más de 93.508 euros anuales brutos. Por su parte, el gerente de la EMT, Jesús Herrero, nombrado por el equipo de Gobierno del PP, cobra 126.897,80 euros brutos anuales, según hizo público hace unos meses el concejal de Compromís, Joan Ribó.

El Consistorio no tardó en replicar. Lo que los sindicatos de la EMT calificaron de recriminación, el concejal delegado de Transportes de Valencia, Alfonso Novo, lo redujo a un intercambio de impresiones. “No tuvo mayor importancia, aunque los representantes sindicales quieran magnificar los hechos. La alcaldesa simplemente cruzó unas palabras con una conductora sobre los paros y los argumentos que defienden los sindicatos sin más trascendencia, pero sin faltar al respeto a nadie”, dijo el concejal en una nota oficial.

Novo reiteró que los conductores ganan más de 3.000 euros mensuales. “Esto quiere decir que el 100% de su salario bruto está en los 39.548,022 euros anuales, que dividido por 12 meses [ignoran las dos pagas extraordinarias] significa que al mes reciben unos 3.295,66 euros”.

Las espadas siguen en alto. Mañana, miércoles, habrá consejo de administración de la EMT, solicitado por la oposición, para hablar de las negociaciones con los sindicatos.

Barberá rechaza "engrandecer" lo ocurrido

EUROPA PRESS

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha negado este martes haber abroncado el pasado sábado a una conductora de un autobús de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) que había estacionado en una parada frente a su casa con pegatinas de 'Rita no paga'. Ha indicado que lo único que hizo fue preguntarle a esta trabajadora qué es lo que no paga la primera edil y ha lamentado que se "engrandezca" lo sucedido.

Según ha explicado, el sábado por la tarde vio "un autobús parado, vacío y lleno de pegatinas de 'Rita no paga'" y a su conductora en la acera. Barberá afirma que preguntó a la conductora qué es lo que ella no pagaba, como se podía leer en las pegatinas. Ha indicado que ésta no lo supo decir y ha destacado que la EMT "está pagando a todos".

"Sencillamente, ni abronqué, ni nada de nada. Le encanta a la gente engrandecer", ha señalado la alcaldes, que ha admitido que explicó "a la gente de alrededor que efectivamente el sueldo medio de un conductor es de 3.333 euros" y que lo que se está pidiendo es "bajar un 10% aproximadamente el salario para estimular la solidaridad".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Cristina Vázquez
Periodista del diario EL PAÍS en la Comunitat Valenciana. Se ha ocupado a lo largo de su carrera profesional de la cobertura de información económica, política y local y el grueso de su trayectoria está ligada a EL PAÍS. Antes trabajó en la Agencia Efe y ha colaborado con otros medios de comunicación como RNE o la televisión valenciana À Punt.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_